Acuerdo regional para el desarrollo productivo, científico y social en el Teatro Argentino de La Plata
Ustedes saben que este es el último día de campaña, la campaña termina, empezamos la veda mañana a las 8 de la mañana, se termina la campaña oficialmente. Y ya entramos en el periodo de cómo se podría decir, velar las armas para esperar lo que es después la elección tan importante y crucial de este 22.
Ayer u hoy, no sé cuándo, hoy creo, me comenta Julio que se iba a hacer efectivamente esta reunión tan importante, la verdad es que estoy cometiendo dos faltas de cortesía, la primera es que llegué muy temprano, creo que peor que llegar tarde, es llegar muy temprano. Vieron cuándo te tocan el timbre y… Así que llegué muy temprano también para asegurar la presencia y una participación en este acto.
Le quiero agradecer a Julio, a Fabián y a Mario y a Florencia por supuesto por la invitación, a todos nuestros candidatos, a todos los representantes de diferentes instituciones, le quiero agradecer a todos y todas, cada vez que hay un acto en La Plata, una reunión en La Plata que a uno le parece que van a ir no sé, 10, 20 personas y se llena de militantes como hoy, está viva, está presente, está funcionando, está enérgica, está luchando la militancia en La Plata, la unidad en La Plata así que una inmensa alegría poder compartir. Así que lo primero era llegar temprano y lo otro es que me tengo que retirar medio a las corridas y después va a continuar el acto, pero no puedo dejar de compartir con ustedes algunas palabras.
Primero que a veces las cosas pasan y pasan en momentos como este, electorales y donde la realidad y la cotidianidad está por decirlo así un poco saturada, no hay ni tiempo de absorber las noticias, las noticias genuinas, ni tampoco en el bombardeo que nos tienen acostumbrados de operaciones mediáticas, judiciales. Bueno, es verdad que se vive un clima y una situación de un poco de confusión, pero le quiero dar importancia a estas reuniones, este acto, a esta oportunidad a ya prácticamente días de la elección del 22 y lo quiero hacer porque La Plata tiene una oportunidad enorme, que yo quiero destacar, me parece que fue un intenso trabajo, una especie de tránsito, sería una especie de construcción que tiene algo de épico para llegar al día de hoy, porque hoy estamos muy cerca de dar un vuelco histórico en esta ciudad que tiene que ver no solo, y lo cuchicheábamos recién con Florencia, no solo que el próximo intendente sea Julio Alak acá en La Plata, sino que lo haga en el marco de una unidad, en el marco de un programa, en el marco de un proyecto, en el marco de una campaña que recorrió esta ciudad una y mil veces, que la puso en valor y que lo haga hoy rodeado de los intendentes de Berisso y de Ensenada mostrando que la capital de la provincia de Buenos Aires está en La Plata pero configura una única región, lo que le da junto con la universidad, con el CONICET, con el puerto, junto con el astillero, junto con su cordón hortícola, junto con sus parques industriales que no es raro ¿no? cuando uno ve que algo en La Plata le cambió la vida tiene que ver con este hombre: con Julio Alak.
Y esta, no me salía la palabra, esta suerte de peregrinación porque si uno pone todos los hechos, todos los sucesos, todo lo que ocurrió en línea creo que puede tener un momento fundamental, un momento bisagra ahora este 22 de octubre en la elección, ¿por qué? porque me parece que más allá de la coyuntura, más allá de este minuto que estamos acá, más allá de estas situaciones, más allá de la inminencia del acto eleccionario, más allá de todo eso creo que hacía falta, que era una importante deuda, una deuda histórica y fundamental la de empezar a pensar a La Plata, no ya como una ciudad grande, digamos un pueblo grande como dicen ciudad chica, pueblo grande empezar a pensar a La Plata como integrada con la región pero además como una novedad, lo comentábamos recién con Florencia, voy a cometer una incidencia. Pero yo creo que si ocurren las cosas que deben necesariamente ocurrir, si Julio es el intendente, si llevamos adelante este acuerdo regional para el desarrollo productivo no es que le va a cambiar el perfil, no es que le va a cambiar el posicionamiento a La Plata sola, sino que va a surgir en la provincia de Buenos Aires un nuevo centro, un nuevo espacio que va a irradiar a la provincia entera.
Yo creo que esto no es sólo importante para La Plata, para Berisso, para Ensenada no es sólo importante por el carácter de capital provincial sino que es importante para la provincia de Buenos Aires que esta región que estaba disjunta, que estaba separada, que tenía un puesto en Ensenada que se llama puerto de La Plata y que hoy tenemos un gobierno municipal y tuvimos un gobierno provincial que le dio la espalda, no al río, sino al río, al puerto y a estas ciudades de Berisso y Ensenada.
La posibilidad de integrar esta región es también un paso central en un trabajo que estamos haciendo desde que asumimos parte del proyecto, digamos, la parte más filosófica o uno podría decir casi metafísica, que tienen estas cosas que estamos haciendo que cuando se narran… Estos días también las estuvimos narrando bastante, lo que se hizo en materia de cultura, lo que se hizo en el Ministerio de Mujeres, lo que se hizo en el Ministerio de Ambiente, lo que se hizo en el Ministerio de Educación, lo que se hizo en el Ministerio de Seguridad, lo que se hizo en el Ministerio de Producción, lo que se hizo en materia de salud, uno lo va contando y son todos eslabones de una misma cadena y esa cadena conforma lo que nosotros planteamos como una discusión, como una también construcción y también como una disputa por la integración de la provincia de Buenos Aires y por la identidad de la provincia de Buenos Aires ¿por qué? Porque se ha convertido en una suerte de sentido común muy arraigado antes de este periodo, pero muy establecido, muy arraigado, casi que se puede decir con toda liviandad que la provincia de Buenos Aires es inviable. Y entonces ahí como corolario de este axioma se llega a la conclusión de que la solución para la provincia de Buenos Aires es separarla, es dividirla, permítanme decirlo de otra manera, es romperla.
Y yo creo que cuando estas cuestiones aparecen tan reiterativamente y se empiezan a repetir por más que tienen una intencionalidad política y que la idea surge de la derecha argentina romper la provincia de Buenos Aires, por más que eso ocurra hay que tomarla también, una vez que entra, por su parte de verdad.
¿Y cuál es la parte de verdad? Que la provincia de Buenos Aires hace mucho tiempo empezó un proceso de fractura interna, que se consolida con esas presuntas antinomias, contradicciones que conforman la Provincia, el Conurbano por un lado, el interior por el otro, el campo por un lado, la industria por el otro, la riqueza por un lado, las situaciones de vulnerabilidad y pobreza por el otro. Bueno, empieza a plantearse que este resultado histórico de políticas básicamente neoliberales que infligieron este daño en la provincia de Buenos Aires, bueno empieza a plantearse, que eso es inexorable, que eso es indestructible, que eso es así y que lo que hay que hacer es que como la provincia de Buenos Aires ya está partida y ya está dividida, lo que falta es darle un anclaje institucional y efectivamente realizarlo desde el punto de vista geográfico, legal y de los límites, partir y dividir a la provincia de Buenos Aires. Quiero decir que este gobierno más allá de lo que hacen salud, educación, en el sistema penitenciario, lo que hacemos con los intendentes de la provincia de Buenos Aires tiene una especie de guía, una especie de norte que va en la dirección exactamente inversa. Dicen que la provincia de Buenos Aires hay que dividirla porque es heterogénea, es muy grande, porque tiene diversidades, particularidades. Nosotros decimos que justamente por eso hay que caminar en la dirección contraria. El objetivo es volver a integrar a la provincia de Buenos Aires, volver a establecer una identidad única de los y las bonaerenses, un orgullo de la provincia de Buenos Aires y esto tiene como elemento central, como elemento fundante, que la capital La Plata, vuelva a ocupar el lugar central de capital de la provincia. Que sea desde La Plata que se gobierna, que sea desde La Plata que se decide, que sea desde La Plata que se funciona, y que entonces eso empiece a cambiar los ejes de todo tipo, pero particularmente el eje productivo, así que cuando hablo de la Plata a partir de hoy y que se firma esta importante documento empiezo a hablar, no solo de La Plata, sino de la Región Capital compuesta por Berisso, por Ensenada y La Plata como un todo como en unidad con un proyecto común.
Y creo también, y ya para terminar, que eso puede ser planteado de manera abstracta y general, pero que tiene que tener una bajada a proyectos concretos. Este acuerdo contiene varios de esos proyectos concretos que tienen que ver con darle a la Región Capital una nueva, no solo una nueva estructura productiva, no sólo una nueva articulación, sino también una nueva razón de ser, una nueva razón de ser.
En esta situación, creo que un factor que contribuye fuertemente a los problemas que tenemos es resolver la cuestión de la identidad de la provincia y la integración de la provincia es que a nuestra capital, a la ciudad de La Plata se la gobierna con desdén, se la gobierna con exclusión, se la gobierna con desprecio, se la gobierna sin proyecto, dejando la ciudad, que es un monumento histórico, que es un bastión de la provincia de Buenos Aires, se lo se lo deja, como lo llamas vos Julio, abandonado, se lo ha abandonado. Se ha abandonado, se ha desertado, se ha desertado de esta discusión y de esta pelea por darle el protagonismo a la ciudad de La Plata y a la Región Capital.
Por eso creo que es un momento muy importante. Creo que es un momento fundacional. Creo que además de ser un acuerdo, es una declaración de principios y además de ser un acuerdo y una declaración de principios es un proyecto, es un proyecto de ciudad, es un proyecto de región y participa, no tengan duda, en nuestro proyecto de provincia. ¿Cuál es ese proyecto de provincia? rescatar la identidad Bonaerense y darle a la provincia de Buenos Aires un lugar también que perdió hace tiempo. Muchas veces se comenta que el problema es si el Gobernador quiere ser presidente, si el presidente se pelea con el gobernador, acá en la ciudad, se lo conoce como la maldición de Rocha, o se lo conoce también como la maldición de Alsina, es decir, podría ser la maldición de todos los gobernadores y algunos piensan.
Y es más, hay ejemplos recientes, un ejemplo muy reciente Vidal y Macri, se acuerdan que también tuvieron fuertes conflictos. Hubo ejemplos históricos el propio Perón con Mercante, es decir que es una constante en la historia nacional. ¿Y cómo se ha resuelto esto? yo creo que bajándole el precio y quitándole valor a nuestra provincia. No como un proyecto político personal y como un trampolín para acceder a otro cargo, si no la provincia de Buenos Aires como un lugar de liderazgo para el interior Federal de la República Argentina. Un liderazgo que tiene que ver con un modelo del país que está distante de las 100 familias porteñas, que está distante de las 20 manzanas, que está distante de una idea de un país importador, de un país financiero, de un país de explotación de recursos naturales, y si pensamos en lo contrario de eso, por supuesto que tenemos que hablar de una provincia productiva. Estamos en la provincia productiva por excelencia, estamos en una región que tiene afincada buena parte de la producción de la provincia de Buenos Aires. Lo que nos falta es devolverle ese lugar, esa posición y hablar desde ahí.
No se trata solo de hablar desde un cargo, no se trata de hablar ni siquiera desde un sector político como es el peronismo, que obviamente es intrínseco en la provincia de Buenos Aires, porque la PBA es una provincia productiva. Nos vienen los Milei y las Bullrich a proponer ahora el ajuste, la dinamita, la motosierra, nos vienen a proponer quitarle el derecho a la educación, a la salud, nos vienen a proponer las privatizaciones, nos vienen a proponer el achicamiento del Estado, nos vienen a proponer esa política permanente de sumisión a intereses extranjeros.
Y yo creo que no hay ni siquiera que invocar las banderas históricas, lo hicimos este 17 de octubre en un estadio lleno adentro y lleno afuera, como pocas veces se vio en los últimos tiempos: un 17 de octubre de unidad de todos los sectores del sindicalismo, de los movimientos sociales, un 17 de octubre también con todas las organizaciones, con todos los partidos que componen Unión por la Patria, con el candidato a presidente y próximo presidente de los argentinos y argentinas, Sergio Massa. Así pasamos el 17 de octubre.
Pero, vos, Julio, hacías eje en esa campaña del 19. Yo quiero hacer eje en este gobierno, en estos cuatro años de gobierno. Lo planteábamos desde el comienzo, un gabinete compuesto por militantes, que no es que se quedó por haber recuperado La Plata como sede de gobierno, no es que se quedó en su oficina sino que anduvo recorriendo toda la provincia de Buenos Aires, cada rincón, cada lugar, teléfono abierto con todos los intendentes, con todos los sectores, listos para adoptar y asumir el lugar que tiene que tener el gobierno de la provincia.
Pero repito lo que agrede esta idea de los liberales, de la derecha, no es solamente a nuestro movimiento político, no es solamente a Unión por la Patria, no es solamente a los que conformamos parte como dirigencia o como militancia. Es a la provincia. El problema con Milei y con Bullrich, el problema de la dinamita y de la motosierra, el problema de quitar derechos es que uno recorre cualquier lugar de la provincia de Buenos Aires y nadie te pide ni motosierra, ni dinamita ni ajuste. Te piden otra escuela porque falta, te piden mejorar el hospital, te piden arreglar la ruta, te piden terminar una autopista o te piden levantar un astillero o te piden invertir en un puerto.
Qué le vienen a plantear a la provincia de Buenos Aires que las soluciones van a venir por aplicar las recetas del FMI, por aplicar las recetas de la derecha, por aplicar lo mismo que ya se hizo en los 90 con Cavallo, lo mismo que ya hizo Macri, lo mismo que ya hizo Martínez de Hoz. Esto no es que agreda solamente a nuestras ideas, solamente a nuestros anhelos, agrede a un pueblo de la provincia de Buenos Aires que se define por la producción y por el trabajo.
Es un pueblo de producción, de trabajo, que necesita salud, educación, seguridad. No se arreglan los problemas que tiene la provincia con menos Estado, se arreglan con más y mejor Estado, y se arreglan por tanto con Unión por la Patria, con Sergio Massa presidente, se arreglan con Mario intendente de Ensenada, se arreglan con Fabián intendente de Berisso, se arreglan con Julio Alak intendente de La Plata.
Así que muchísimas gracias, mucha fuerza. Es el camino correcto, lo venimos recorriendo, por lo que hicimos, por lo que hay que defender y sobre todo por el compromiso que tenemos con todo lo que le falta a nuestro pueblo.
Muchísimas gracias.