I Congreso de sinólogos latinoamericanos en la UNPAZ

Bueno, buenas tardes a todos y a todas. La verdad que también voy a resumir la parte de los saludos y agradecimientos, pero dejar constancia de la importancia que tiene para la provincia de Buenos Aires que acá en el territorio de nuestra provincia, en una universidad nacional pero que queda en un distrito provincial, se desarrolle este importante congreso.

El congreso tiene su evidente importancia pero creo que lo más trascendente que conocemos hoy y que tenemos que celebrar, es el lanzamiento de un centro dedicado a la sinología acá en José C. Paz y en la provincia de Buenos Aires. Y por supuesto, también, la maestría que es un punto de partida importantísimo para nuestra provincia y para la Argentina.

Y también el anuncio donde tengo que agradecerle de nuevo por su visión, por su generosidad, al intendente Ishii de la pronta inauguración del edificio nuevo para ciencia y tecnología de la Universidad de José C. Paz. Vamos a estar acá de nuevo acompañándolos.

Esto indica que en momentos en que el Gobierno nacional se retira, deserta, y a veces agrede, a los procesos de desarrollo, a la universidad pública, al Estado en general, en la provincia de Buenos Aires, y a través del sistema de universidades, y en conjunto con el gobierno chino y sus representantes, seguimos empujando por el desarrollo, por el crecimiento y por la inclusión en la Argentina y en la Provincia.

China es hoy la segunda economía del mundo, si se la mide en dólares corrientes, pero la primera si se la mide en dólares de poder adquisitivo de paridad. De forma tal que creo que se han dado pasos muy importantes a partir del inicio de las relaciones diplomáticas en el año 1972, para ir afianzando un vínculo que además nos convierte hoy en el segundo socio comercial, lo convierte a China en el segundo socio comercial de Argentina.

No son sólo palabras o mediciones. En el año 2004 Néstor Kirchner firma con Hu Jintao la asociación estratégica. Luego en el año 2014 me tocó acompañar a Cristina Fernández de Kirchner cuando se rubricó la asociación estratégica integral, junto con Xi Jinping. Luego, en 2022 me tocó acompañar también al entonces presidente cuando el país ingresó a la Iniciativa de la Franja y la Ruta.

Recuerdo que cuando Néstor Kirchner anunció inversiones de China en Argentina por un monto de 20.000 millones de dólares, muchos lo tomaron para la burla y comenzaron a hablar de que era un cuento chino. Pero más adelante, durante la segunda gestión de Cristina, se firmaron acuerdos, inversiones por las represas hidroeléctricas, por las centrales nucleares, por el Belgrano Cargas, por energías renovables, hidrocarburos, a través de la asociación entre Sinopec e YPF, con Huawei y Lenovo, y un swap de monedas que convirtió realmente en motivo de burla los que habían hablado mal y desfavorablemente de esta relación. Superamos con creces los 20.000 millones de dólares de inversión de China en la Argentina.

Todas estas inversiones que desde lo cuantitativo son muy significativas, también tiene que ver con el tipo de vínculo que estableció China con Argentina en ese tiempo, que guardaba como objetivo el mutuo beneficio de los dos países, pero además en el caso específico de Argentina, energía, transporte, hidrocarburos en particular, no convencionales. Eran instrumentos y motores del desarrollo industrial de la Argentina. Estábamos ante acuerdos que no eran acuerdos ni colonialistas, ni imperialistas, sino para el desarrollo mutuo de los pueblos.

En ese sentido, también el respeto de la soberanía de los países. Así que hay que destacar el apoyo permanente de China a la soberanía de Argentina sobre las Malvinas. De la misma manera que desde la provincia de Buenos Aires reafirmamos nuestro reconocimiento de una sola China.

La relación entre los países tiene que estar guiada por la inteligencia, por el mutuo beneficio, con una visión multipolar. De manera que califico de bochornoso la decisión del actual gobierno de no incorporarse a los BRICS.

Un error histórico, y esto va por mi cuenta, producto de anteojeras dogmáticas e ideológicas, absolutamente contrarias a los intereses nacionales. Así que reafirmo la vocación, desde la provincia de Buenos Aires, de ni bien tengamos la posibilidad incorporarnos al BRICS.

Hasta donde llega el alcance de nuestra provincia, vamos a seguir trabajando para profundizar los vínculos con China, con su pueblo, desde una perspectiva del respeto mutuo, la felicidad de ambos pueblos. Esto implica, en el corto plazo, generar proyectos de inversión de China en Argentina, afianzar los lazos a través de la cooperación, y por supuesto, acompañar la iniciativa de José C. Paz.

Así que para terminar, el agradecimiento, ponernos a disposición para acompañar estos proyectos. Agradecerle también a Sabino, que lo ha trabajado con nosotros durante este tiempo, y al senador Parrilli, por supuesto que al centro mundial y al embajador, al que consideramos un amigo. Muchísimas gracias.