III CONGRESO ESTADO PRESENTE “VIOLENCIA POLÍTICA Y DE GÉNERO: DESAFÍOS DE LA DEMOCRACIA”

AXEL KICILLOF

“Buenos días a todas, a todes, a todos. Muchas gracias por el afecto, muchas gracias por la sorpresa de escucharla a Paola. Ustedes sabrán que Paola Pabón, que estuvo en Argentina hace poco tiempo, fue ministra de Gobierno de Rafael Correa, luego electa como gobernadora de Pichincha, Prefecta ya e inmediatamente después encarcelada por el gobierno de Lenín Moreno durante 72 días. Contaba recién Paola que anduvo con tobillera, anduvo con obligaciones de presentarse pero todo eso resultó como todas estas cuestiones donde a veces al amparo de un poder judicial cómplice, instrumento de un partido judicial, se presentan como condenas judiciales cuestiones que son simplemente de la persecución política. Así que muy acertado y para mi muy importante escuchar la experiencia de Paola. Y decirles que hubo elecciones hace poquito en Ecuador y estuvo cerca, pero creo que ahora viene el ballotage, pero estuvo cerca de ganar el partido de Rafael Correa y además con una candidata mujer. Así que esperemos que haya pronto también una presidenta mujer en Ecuador.

Ahora, luego de esto, agradecerles también a Estela, al Ministerio, a todos los que estuvieron organizando no un congreso sino el tercer Congreso de Violencia de Géneros en la PBA. Recién escuchaba las palabras de Estela y viniendo para acá leía un poco la batería, el conjunto de políticas, de novedades que hubo en materia de géneros y diversidad en la PBA. La verdad que hacía un mínimo resumen de las políticas y de los resultados. Pero quiero decir que se instaló un Ministerio, que antes no existía. Pero se está llevando adelante a través del gobierno de la PBA, lo decía también el Rector, se está llevando adelante una verdadera revolución en materias de políticas de género. Es un trabajo muy fuerte que se está haciendo. Y es como bien se dijo, la continuidad de las luchas que vienen de muy atrás.

Así que unas grandes felicitaciones por este congreso, por todo lo hecho, por lo que se dijo y por lo que no se contó pero que está cambiando de cuajo el gobierno y la política en la PBA. Muchísimas gracias, muchas gracias por esto.

Me parece también acertado el nombre que se le ha dado a este encuentro. Ustedes saben que mañana es un día muy importante, es un día que nos va a tener creo que a todos de nuevo en estado de conmoción. Mañana 1 de septiembre se cumple un año de uno de los hitos más atroces que le tocó vivir en este periodo democrático, en los 40 años de democracia. Como si fuera poco estamos conmemorando 40 años de democracia y viendo que al mismo tiempo algunas fuerzas profundamente antidemocráticas no se han extinguido. Ni han desaparecido con el paso del tiempo, todo lo contrario. Han aflorado, han aflorado a los 40 años de democracia las amenazas que esa democracia tiene latentes. Escuchamos hablar, inclusos desde micrófonos y desde espacios dirigenciales muy importantes, a quienes hoy niegan el genocidio que ocurrió en Argentina durante la dictadura. Aquellos que buscan el olvido, aquellos que buscan, a través del negacionismo, que nuestro pueblo, no solo pasen esa página como si no hubiera existido, sino también que vuelva a vuelva olvidando a reivindicar, de alguna manera, lo que ocurrió en Argentina y esas políticas. Estamos en un momento delicadísimo.

Justo, también creo, sigo con las felicitaciones, es un acierto hacerlo en la UTN, en la regional de La Plata. Hace tiempo que Luis y Rubén me vienen diciendo que está a disposición la UTN para que coordinemos y articulemos más políticas con el Estado provincial. Es importante también que se haga en Berisso, km 0 del peronismo. Así que se condensa en el municipio, en la universidad, en el título del congreso, en el ministerio una serie de cuestiones que son importantes poner encima de la mesa y discutir con un poco más de profundidad. Es acertado esto de llevar adelante jornadas, congresos, espacios de deliberación, de pensamiento, de intercambio. Porque los que hablan del diálogo y del consenso, se dedican a cerrar de los espacios de diálogo que se pueden llevar adelante. Hablan del diálogo y del consenso porque intentan, a veces, imponer determinadas políticas y determinadas miradas de una manera autoritaria.

Creo que se ha hecho abuso de la palabra diálogo y de la palabra consenso desde determinadas tribunas. Porque la democracia implica discusión, implica polémica, implica enfrentamiento en el terreno de las ideas. Obviamente algunos hablan del consenso como si fuese una especie de escudo para no discutir nada. O como si el consenso estuviera por encima de la posibilidad democrática de disentir. Llevan adelante determinadas políticas, tienen determinados discursos y enarbolan la idea del consenso para legitimar cuestiones que de ninguna manera nosotros estamos de acuerdo y que no estamos de acuerdo en suprimir en la disputa política.

Si fuera todo por el consenso no tendríamos partidos políticos, no tendríamos que ir a votar porque sustituyen con la palabra consenso una idea totalitaria de unanimidad sin discusión.  Yo, en cambio, reivindico no estar de acuerdo, está muy bien dialogar, discutir, está muy intercambiar pero hay cosas de las que no estamos de acuerdo y es muy difícil que tengamos un consenso. No vamos a tener un consenso con las políticas de ajuste. No esperen que estemos de acuerdo con las políticas de cerrar, de quitar y de restringir los derechos. No esperen el consenso, no estamos de acuerdo. Por eso damos la disputa política, por eso vamos a discutir esta campaña y no le tenemos miedo al disenso. Discutiremos todo lo que tengamos que discutir en esta campaña,  pero no esperen que de manera pasiva y callada admitamos determinadas ideas, tremendamente reaccionarias.

Esto se hace en la universidad y lo organiza el ministerio de las Mujeres. Creo que tanto la universidad pública, gratuita, democrática, como el ministerio de las Mujeres están hoy en la mira. Están como en peligro de extinción. Cuando uno mira los discursos de la derecha, se han ensañado con algunas cuestiones. Hace unos días decían que iban a cerrar el CONICET. Han dicho una y mil veces que van a cerrar un montón de ministerios. Pero siempre de manera sistemática, de manera casi obsesiva, vuelven sobre la idea, dicen que van a cerrar un montón de ministerios pero el primero que dicen que van a cerrar es el de las Mujeres.

Lo plantean de una política de ajuste, de ahorro, dicen ‘vamos a cerrar muchos ministerios para ahorrar plata’. Algo que se emplearía como en la época de Macri, que decía que cerrar el Fútbol Para Todos para hacer 3.000 jardínes, pero todos sabemos cómo terminó esa historia. Nos quedamos sin el pan y sin la torta, como quien dijera.

Pero a mí me llamó la atención, cuando uno mira el presupuesto es que la verdad  es que la porción de recursos que se destina a la políticas de géneros, a los Ministerios mismos. Pero si sumamos todo, incluso con este presupuesto que estamos llevando adelante, que hoy lo identifica en diferentes áreas. La verdad que no es relevante, no es relevante la proporción del gasto destinado a estos nuevos Ministerios dentro del conjunto de los gastos nacionales. Es decir, es básicamente cerrar los Ministerios de las Mujeres nacional, provincial o incluso las áreas a nivel municipal, no le va a permitir al Estado un ahorro sustantivo para pagar la deuda o para llegar al déficit cero o para generar las políticas de austeridad que quieren. Así que cuando uno mira los datos objetivos se da cuenta que esa saña que hay viene de otro lado. No es un tema de ahorrar plata lo de cerrar o insistir con obstinación en cerrar los Ministerios de las Mujeres. Es otra cosa distinta.

Además, como era previsible, la derecha además de buscar el ajuste, además de impedir cualquier intento de independencia, además de atentar con la soberanía. Son políticas profundamente machistas. Son dirigentes, son políticas, son ideas, profundamente machistas. Y a veces intentan disimularlo.

Entonces me parece que estamos en un momento decisivo. Estamos a poco tiempo de una elección que como hemos visto lleva adelante hoy una suerte de debate público sobre cuestiones muy profundas, sobre cuestiones sustantivas. Y sin embargo, cuando uno podría decir ‘por fin vamos a discutir el modelo de desarrollo para Argentina, por fin vamos a discutir cosas tan importantes como la justicia social, como las necesidades y los derechos’. Lo cierto es que el entusiasmo rápidamente se extingue porque estas discusiones terminan siendo sustituidas por slogans, por cuestiones sensacionalistas y por ideas horriblemente superficiales. Se discuten temas sustantivos pero de una manera superficial, marketinera y efectista.

A mi me parece que ahí hay que aprovechar. Nos quedan pocos días para que se produzca la elección. Y creo que cada vez que se plantea alguno de estos debates sustanciales nosotros no tenemos que eludirlo y menos todavía responder a una frase efectista con otra frase efectista. Creo que hay que ir a fondo. Porque vale la pena aterrizar, por decir así, hacer concreto y demostrar a la sociedad qué son en realidad las propuestas que nos traen. Ahí hay un trabajo sustancial para las elecciones que vienen. Poder exhibir, poder mostrar, poder desenmascarar esas frases a veces exageradas, a veces simplemente slogans, qué significan en la práctica real y cotidiana de nuestro pueblo esas políticas si es que se llevan adelante. Creo que hay un desafío enorme. Porque sino vamos a estar discutiendo un slogan contra otro.

Cuando ellos hablan de dinamitar, cuando ellos hablan de recortar, cuando nos traen la motosierra. Cuando empiezan a hablar de que van a cerrar no sé cuántos ministerios. Creo QUE Hay que hacer un esfuerzo muy grande de traducción de esas ideas difusas y de impacto a la vida cotidiana de la PBA. Cuando hablan de que hay que cerrar el Conicet no están diciendo que con eso van obtener un inmenso ahorro en materia de recursos públicos, que entonces van a poder llevar adelante de quitarle todos los impuestos a los ricos porque se van a ahorrar un gasto enorme o cuando hablan de cerrar el ministerio de las mujeres. No es eso. Es otra cosa. Están hablando, en el fondo, para qué sirve el Estado, qué hace el Estado. Ahí nosotros actuamos, a veces, con exceso de prudencia, de cautela, de timidez. Porque como reconocemos todo lo que falta, como sabemos que hay una deuda muy grande todavía, por eso no nos animamos del todo a reivindicar lo que hay y lo que se ha hecho. Y entonces se pierde de vista lo que está en riesgo y lo que se está por perder.

Es muy importante esta cuestión, lo dicen al pasar, lo tiran por ahí, pero van plantando mojones de una discusión importantísima en el futuro de la Argentina. Cuando dicen que la universidad pública, por ejemplo, cuando dicen livianamente ‘¿para qué hay tantas universidades públicas?’ y lo dicen ante audiencias cómplices, que nunca han pisado, ni les interesan las universidades públicas en la PBA. Pasa. Lo dicen sino en algún periodismo que participa de las mismas ideas. Por lo tanto, plantean una barbaridad, lo dicen y no hay ni una repregunta. Entonces oímos decir ‘¿para qué hay tantas universidades públicas?’ ó ‘¿para qué hay tantas universidades nuevas en el conurbano?’ Bueno, acá hay una universidad que abrió el peronismo, que demostró ser de excelencia de calidad que está en todo el país.

Durante el gobierno de Cristina, 17 nuevas universidades, muchas de ellas en el territorio de la PBA. Después complementaron con que ¿para qué tantas universidades? Si los sectores populares, los hijos de los trabajadores, los vulnerables, los sectores medios también. Por eso, cuando plantean estas cuestiones al pasar, creo que hay que aterrizarlas. Ellos dicen que los hijos de los trabajadores no van a la universidad. Eso implica un enorme desprecio, un enorme prejuicio y un enorme desconocimiento. Nosotros le tenemos que explicar a nuestro pueblo que si la derecha gana las elecciones, si vuelven a gobernar como en los 4 años de Vidal y de Macri. Sí, gobiernan los mismos porque la derecha tiene muchos candidatos pero tiene un solo proyecto que es el de cortar derechos y posibilidades.

Lo que hay que decirle a los pibes o las pibas, que dicen que no le podemos hablar o no sabemos llegarle, cuando uno le da una computadora por el Programa Conectar Igualdad, no se la da como una dádiva o un regalo, sino que le está reconociendo un derecho y le da una oportunidad mayor.

Cuando le damos la computadora porque se la merecen. Cuando le preguntamos qué van a hacer después, nos dicen que van a ir a la universidad. Es impresionante porque si nosotros pudiéramos transmitir con claridad, que lo que estamos discutiendo cuando se pone una boleta en la urna, no es motosierra, dinamita, ajuste, sino simplemente y claramente si los pibes de los hijos de sectores populares, que hoy 80% de los que asisten a las universidades del conurbano son  primera generación del sistema universitario. Cuando ponemos la boleta que parece que dice candidatos, nombres y partidos. En realidad, dos boletas dicen ‘te vas a quedar sin universidad, sin estudios, te vas a quedar sin futuro’. La otra dice: ‘por más universidades públicas, por más presupuesto para las universidades, por más oportunidades, por más carreras, por más centros universitarios’.

Si nosotros pudiéramos poner en debate esto, que cuando se le consulta si está de acuerdo con privatizar todo, con cerrar ministerios, dice que no. De alguna manera, tal vez por el malestar, por la confusión, por la época. No soy sociólogo y no pienso ponerme a caracterizarlo, soy muy respetuoso con lo que vota nuestro pueblo, no ganamos nada con despreciar la decisión que se toma. Pero hay que ponerle la gravedad que tiene. Hay que poner en lugar el debate.

Cuando ellos dicen que van a cerrar tal ministerio, como el ministerio de educación, de salud para subordinarlo a un ministerio más general como ya se hizo en el gobierno anterior y así nos quedamos sin salud, sin equipamiento, sin hospitales públicos. Cuando dicen eso y hablan de cosas muy generales,  a veces atractivas, cuando se dicen cosas generales sobre algo que no se soluciona hace tiempo, a veces hay una idea de que se le debe dar una solución simple, taxativa y novedosa. Entonces en la originalidad de hablar de vouchers, dolarización, parece que se resuelven los problemas.

Hay que aterrizar estas cuestiones. Cuando dicen que van a cerrar el ministerio de las Mujeres, lo que dicen es que va a haber más violencia en los hogares, que se van a morir más mujeres por violencia de género. Lo que van a poner en la boleta es si va a haber más o menos femicidios. La boleta de UxP es más presupuesto para las políticas, más penetración de las políticas

Me parece que tenemos que llevarlo a la tierra, me parece que tenemos que llevarlo a la vida cotidiana. Por eso esta es una elección donde va a haber una comunicación en los canales porteños, donde vamos a tener que quienes somos dirigentes políticos someternos a veces a esa agresión permanente, a esa parcialidad permanente, pero que creo que finalmente esta elección se va a decidir en los barrios, en las discusiones cara a cara. Se va a definir en lo que podamos llegar a transmitir de manera más humana, más directa, a través de la empatía, a través del abrazo. Se va a definir esta elección mucho más que a partir de lo que podamos hacer en los grandes medios nacionales, de lo que podamos hacer la dirigencia política o en los debates que a veces tienen formatos que no se prestan para explicar en profundidad de qué pasa esto.

Por eso me es importantísimo hacer en este momento este congreso, sabiendo que también está en juego si vamos a tener o no un cuarto congreso. Está en juego si todo ese esfuerzo que se ha hecho, yo siempre digo que trabaja en tres planos el Ministerio de las Mujeres. Trabaja en el plano de sus políticas específicas, que creo que se han puesto en marcha en tiempo récord, tres años es poco para poner en funcionamiento un ministerio nuevo que pasa de tener los lugares a tener qué se yo, vericuetos burocráticos del Estado, de las firmas, de los presupuestos. Es muy difícil en el Estado innovar. Así que haber abierto el Ministerio, tenerlo en funcionamiento, tener  muchísimos programas, tener esas políticas específicas que surgen directamente del Ministerio es una de las funciones. En eso creo que se han cumplido todas las expectativas y más, Estala, las políticas que hay, los programas que se llevan adelante, los resultados que van teniendo. Pero ese es un aspecto de las políticas que va teniendo el Ministerio.

El otro, yo decía, es instalarlo como una política transversal a los demás ministerios. Es necesario que el enfoque no sea solo del Ministerio de Mujeres, tiene que estar en todos los demás Ministerios en cada decisión que tiene el Estado. Es una mirada, es una perspectiva y creo que entonces ese desafío, si se puede, era más complejo que el anterior. Más complejo que abrir una serie de programas, tal vez desconectados y estancos, era coordinar con el resto del Estado provincial e insertar e instalar la perspectiva de géneros en todas las políticas del Estado provincial.

Eso, obviamente, que falta, que es una cuestión cultural. Porque también después cada uno de quienes tenemos responsabilidades, de quienes desempeñamos funciones tenemos que cambiar nuestra mirada. Antes se llamaba descontruirnos y yo creo que ahora hemos pasado a otra etapa, después de deconstruirnos, que es empezar a construir un Estado feminsita.

Y luego, en tercer lugar, que esto significaba ponerlo en el Estado provincial y en todos los Estados locales de la PBA. Ha sido inmenso el trabajo que se hizo en los municipios. Fabián en el tuyo, pero en muchísimos municipios siguiendo el ejemplo del Estado provincial, se han abierto diferentes espacios institucionales para las políticas de género. Se que acá también la UTN también lo ha hecho. Se ha generado un efecto dominó donde empiezan a aparecer políticas de género en todas las dependencias de todos los Estados y de todas las instituciones de la PBA. Creo que eso lo hemos inaugurado a través de esta decisión.

Después hay una cuestión que también es compleja y que también es un desafío. Sobre el que quiero hacer un mínimo comentario, porque es algo para discutir bastante. Hace al vínculo entre el Estado y la sociedad, las organizaciones libres del pueblo, los movimientos, las diferentes organizaciones políticas. Esta irrupción de las discusiones acerca de las discusiones de las políticas de género nace, en realidad, en el conflicto, en la lucha, en la calle, a través de miles y millones de mujeres organizadas que modificaron la agenda pública. Es una de las novedades más importantes de las políticas argentinas. Es de las más importantes que surge y que emerge de la política argentina. Ha tenido un papel muy disruptivo. Creo también que el riesgo que se corre, que cuando se empiece a institucionalizar, obviamente es un objetivo nuestro, se pierda esa espontaneidad, esa masividad, se empiece a burocratizar, que se empiece a armar en programa de gobierno, se pierde lo novedoso, de lo vinculado a las necesidades y a las dinámicas de nuestro pueblo.

Ahí había un desafío muy importante, estos congresos muestran que ese objetivo que es un objetivo más general, que esto se puede hablar profundamente y más extenso, pero quiero hablar específicamente del ministerio de las Mujeres. El objetivo era que el objetivo de convertir en ministerio estas políticas no sofocara o no sustituyera toda la movilización y toda la organización que tiene a nivel provincial y que antes no tenía una inserción en el gobierno, que no se deposite en el Estado se llevaba antes adelante a través de las luchas y de la organización popular. Sino que se articule y que sean dos cuestiones que se retroalimentan en las políticas de género.

Dicho de otra manera, no puede haber políticas de género si no se hacen en conjunto con todas las organizaciones, si no se despliegan de una manera articulada, colectiva y donde haya permanentemente nuevas demandas, donde se impulse y que se siga planteando la agenda y hacia dónde va. Que no se cristalice en algo rígido, lo que antes era fluido, móvil y que tenía toda esa potencia.

Por eso creo que era muy importante tener este tercer congreso en este momento tan importante porque estamos cerca de una elección y entonces hay que mostrar lo que se hizo, lo que falta y la voluntad de hacer.

El congreso es importantísimo, marca que se ha tenido éxito en lo que nos proponemos y marca también, de cara a la sociedad, una agenda para el próximo período. No solo quiero que se reivindique lo que se hizo, sino que se explicite los compromisos de lo que vamos a hacer.

Y bueno, así que con respecto al congreso, al encuentro era lo que quería compartir con ustedes. Creo que hay una tarea política y de nuevo, vamos a tener que pedirle a las mujeres de la Argentina, a los colectivos de las diversidades, que sea en punta de lanza en esta lucha. Vamos a discutir con una derecha que se quiere llevar todo puesto, pero particularmente en todo lo que se conquistó en materia de políticas de género, de nuevos derechos y de inclusión. Ahí se tiene todo en riesgo.

Al tomar conciencia de la importancia de lo que se va  a decidir, tenemos que tomar conciencia de la responsabilidad que tenemos. Somos nosotros, no podemos andar llorando o quejandonos que se votó mal o no se comprendió. La responsabilidad es nuestra, dejar hasta el último aliento y transmitir qué es lo que estamos discutiendo en la Argentina en la próxima elección.

Nosotros necesitamos que el próximo presidente sea Sergio Massa para seguir avanzando con estas políticas por lo que se hizo y por lo que falta.

Para cerrar, quiero referirme con esta cuestión de la violencia política. Se que mañana, a mí y a todos nos cuesta hablar de esto. Mañana no solo nos va a venir el recuerdo de la gravedad, del abismo que estuvimos ante el intento de asesinato a Cristina. Creo que lo que mañana tiene que estar más claro y más presente, es que ante un hecho de esta inmensidad, hoy tenemos un partido judicial que se ha dedicado a encubrir y a no investigar. Indicios, casi que diría pruebas, elementos, para comprender cuál es todo el mecanismo que estuvo por detrás del intento de asesinato a Cristina, sobran. Creo que cualquiera de nosotros y le intenta quitar emocionalidad a esto, observa que los grupos que estuvieron implicados, vinieron financiados por directamente fuerzas políticas de nuestra oposición.

Hoy nadie puede explicar por qué la familia del ministro de Economía de Macri compró muebles en una mueblería que no existe, muebles que no existieron, pero que terminaron financiando guillotinas en la Plaza de Mayo.

Creo que este grado impunidad, que bien vos decías Estela, permea para todos lados. Porque si es posible hacer este tipo de cosas y no hay reacción, no hay respuesta, no hay castigo, nuestra sociedad está en graves problemas. Se hace a la vista de todo el mundo, se cometen delitos gravísimos y no se obtiene ninguna respuesta desde la justicia.

Así que es muy acertado porque además de ser violencia política, es y fue un hecho de violencia de género. Indudablemente el carácter de mujer de Cristina está entre los elementos que más irrita a la derecha. Así que simplemente quería compartir estas palabras con ustedes. Está el compromiso de este gobierno, de esta fuerza política, de este gobernador, de tomar las recomendaciones, de estas conclusiones, las ideas que se discutan hoy para convertirlas de nuevo en políticas y en resultados para la PBA. Es decir, lo que van a discutir hoy, después vamos a incluirlo dentro de lo que pensamos hacer.

Lo que están discutiendo no son temas, no son ideas, es un programa para el gobierno que viene en políticas de género. Luego, decirles que quiero agradecer porque a nosotros en carácter de masculino, nos toca acompañar todo esto, posibilitar en la medida de nuestras posibilidades y nos toca aprender de ustedes. Así que agradecerles por eso.

Termino por algo que sé que irrita a muchos, pero quiero dejarlo explícito hoy porque tiene que ver con este congreso, es de las cuestiones más novedosas que ocurre en la Argentina. Es que somos una fuerza política, somos muchísimos dirigentes, somos el peronismo y nos conduce una mujer. Gracias”.