Ampliación y refacción de escuelas primarias en Avellaneda
Buenos días a todos y a todas. Muchas gracias, Jorge. Muchas gracias, Magui. Estamos desde temprano recorriendo Avellaneda con distintas actividades. Estuvimos entregando escrituras, más o menos 650 escrituras, a familias que no las tenían, es un programa gratuito para reconocer -yo digo, Jorge- la seguridad jurídica, ¿no? Que siempre se habla de la seguridad jurídica como un tema de los grandes inversores extranjeros, que tengan seguridad jurídica si no, no vienen. Pero, ¿qué pasa? Hay mucha gente en la provincia que tiene la casa, no tiene el título de propiedad, no tiene la escritura, y entonces le falta seguridad jurídica. Acá venimos a reconocer la seguridad jurídica del pueblo de la provincia de Buenos Aires, que son muchos más, son anónimos, probablemente no tengan tanta prensa, pero tiene esa importancia.
Luego estuvimos recorriendo una escuela también, y ahora acá, que tiene una historia fabulosa. Porque a veces no se toma conciencia del todo lo que significa el voto, ¿no? Porque el momento del voto está cruzado por muchas sensaciones, por muchos sentimientos, tal vez un malestar, un enojo, una resignación, bronca, bueno, cariño por alguien o simpatía por alguien, pero después se vota, en un día, y los efectos son, la verdad, inmensos, inmensos.
Miren la historia que contaba Jorge. En ese momento, yo recuerdo que el partido político que gobernó antes de nosotros, acá en la provincia de Buenos Aires, no Jorge que atravesó esa etapa, decía que querían un cambio, la revolución de la alegría. La revolución de la alegría era lo que estaba votando la gente, y era ‘no vas a perder ningún derecho’, ‘nada de lo que tenes está en riesgo’, ‘todo lo que anda bien va a seguir bien y lo que anda mal lo vamos a mejorar’. Y la verdad que no quiero hacer ni un acto partidario, ni acto de polémica, ni menos todavía traer estas cuestiones a la escuela, pero estamos hablando de la historia de una escuela que como resultado de ese Gobierno nacional y como resultado de ese Gobierno provincial se pararon las obras, se armó un vacío, un vacío que duró demasiado tiempo, ¿no? Y que llevó a montones de dificultades concretas y reales, de familias, de pibes y pibas que entonces se van quedando sin sus derechos, se van quedando sin la educación, o la tienen en peores condiciones.
Hoy tenemos otro gobierno, de la misma… A nivel nacional, esto que decía Jorge, ‘nos falta un socio’, claro, estábamos construyendo 80 escuelas en la provincia de Buenos Aires, con recursos del Gobierno nacional, cambió el presidente, vino el actual, y cortó todas las obras en la Provincia. Y tal vez dicho en televisión, que la motosierra, que… Bueno, pero de nuevo, no quiero politizar o partidizar un acto, simplemente quiero decir que pararon todas las obras. Pararon todas las obras, 1000 obras, 80 de ellas escuelas, que estaban en diferentes grados de avance. Lo comento porque es la realidad que tenemos, nos dejaron sin los recursos y, a veces, con complicación para seguir las obras, aún poniéndole ganas, porque eran contratos, empresas, es muy difícil jurídicamente que se te vaya un socio en la mitad del camino, ¿no? Porque estaba establecido que se iba a hacer de determinada manera. La historia que cuenta Jorge es un poco la historia de nuestra provincia, la historia de Avellaneda, la historia de la Argentina. Hoy estamos viviendo una situación donde los recursos provinciales, los recursos municipales se los queda el Gobierno nacional y no los distribuye más, y para las obras. Tal vez dicho en la televisión, o dicho en TikTok, o en las redes sociales puede ser una frasecita ingeniosa, casi alguno que dice ‘eh, no interesa, mirá qué bien este tipo, va a hacer tal cosa’, y después tenemos estas realidades, la cotidiana, la práctica, las dificultades.
Y recién Jorge hablaba de los comedores escolares, nosotros le damos de comer todos los días a 2 millones y medio de pibes en toda la provincia de Buenos Aires. Y sobre eso, el Módulo Extraordinario para la Seguridad Alimentaria, el MESA, que es un módulo que se le entrega a 2 millones de familias en la provincia de Buenos Aires, financiado íntegramente desde la provincia de Buenos Aires.
Y termino con esto, no saben qué fácil sería usar una formulita. Uno dice, recién me dieron algunos pedidos que faltan, tal cosa en tal lugar, que tal infraestructura, me dieron algunos pedidos, a Jorge también. Saben qué fácil sería gobernar con una formulita mágica por lo compleja, por lo perversa, ‘no hay plata’, ¿no? A cualquiera que viene y dice ‘tengo una dificultad’, ‘necesito esto’, ‘en mi familia’, ‘los medicamentos’, porque cortaron los medicamentos para el cáncer, o diferentes programas que se interrumpieron, o del PAMI los medicamentos, y contestar con esa formulita, como si fuera una explicación, como si fuera algo profundo, como si fuera algo importante y serio.
Entonces, yo estoy acá simplemente para decir que en la provincia de Buenos Aires hay dificultades, que la situación económica es compleja, que lo que está ocurriendo con las familias que no llegan a fin de mes, todo eso lo comprendemos, pero que en la provincia de Buenos Aires, junto con municipios como el de Avellaneda, con Jorge Ferraresi, seguimos construyendo escuelas. Seguimos invirtiendo en educación pública. Seguimos pensando que no todo lo resuelve lo privado y la mano invisible. No por una discusión o una disputa con el sector privado, todo bien, hemos inaugurado fábricas, parques industriales, hemos generado infraestructura que permite que haya privados, pero bueno, diciéndolo sencillamente, por lo privado hay algunos que pueden y otros que no, aunque quieran igual, o aunque le pongan el mismo esfuerzo y las mismas ganas. Querer una vivienda, la quieren todos pero algunos se la pueden comprar y otros no se la pueden comprar. Salud, y bueno, todos necesitan salud, pero algunos se la pueden pagar y otros no se la pueden pagar. Y eso no es que pase, que sea un tema porque en la provincia de Buenos Aires gobierna tal o cual, miren lo que es el planeta Tierra, miren lo que pasa en Europa, la inmigración, miren lo que pasa en EEUU con la salud. En todo el planeta hay mucha desigualdad, y después de la pandemia más desigualdad. Así que algunos que antes llegaban, dejan de llegar. Algunos que tenían laburo, dejan de tener. Algunos que tienen laburo, no les alcanza el sueldo. ¿Entonces qué hacemos con eso?¿Qué decimos? ¿Que lo solucione la mano invisible del mercado? ¿Q que se salve cada uno solo? ¿O el que no puedo, o no llega, decirle que es culpa tuya porque no te esforzaste o no te sacrificaste? Tantos pibes y pibas en la provincia de Buenos Aires que quieren seguir estudiando y que aún siendo pública y gratuita la universidad, tal vez no pueden porque la situación económica no se lo permite, así que aún con la universidad gratuita y universal hay algunos que no llegan.
Yo quiero dejar ese mensaje hoy acá, que es que en la provincia de Buenos Aires pensamos y sentimos distinto, ¿no? Sentimos distintos, porque es una cuestión, también, de política, sí, de política pública pero también de sensibilidad, de qué es lo que te moviliza, qué es lo que te pones como objetivo. Y yo creo que en ese sentido, nosotros, y ahora le hablo a los chicos, nosotros creemos que todos los pibes y pibas de la provincia de Buenos Aires tienen derecho a tener una escuela hermosa como ésta. Todos los pibes y pibas de la provincia de Buenos Aires tienen derecho a tener profesoras, profesores, maestros, maestras, auxiliares que los quieran como estos.
En momentos a veces de desesperanza, en momentos donde las cosas están difíciles, la escuela es importantísima. Es un lugar de aprendizaje, es un lugar, por supuesto, de hacer vínculos, de conocer al otro, ustedes conocen a sus amigos. Ahora los chicos, entre ellos, se dicen ‘amigo’, ‘amigo’. A mí me encanta porque expresa que hay una voluntad, una vocación de generar un vínculo, de generar… Perdón, de generar un compromiso, de darle la mano al otro. No de andar, como pasa a veces en la sociedad, vieron que hay violencia, hay enojo, en la escuela nosotros tratamos que las escuelas de la provincia de Buenos Aires sean un territorio de paz, de paz y de solidaridad.
Por eso es tan importante la escuela pública, la salud pública. Por eso chicos, chicas, queremos que tengan una linda escuela, queremos que la pasen bien, queremos que aprendan un montón, queremos que la cuiden a la escuela y que se cuiden entre ustedes. Queremos que, a veces en la sociedad o afuera de la escuela pasan cosas que vienen y entran a la escuela. Como dice tantas veces nuestro ministro Alberto Sileoni, en la escuela a los pibes le preguntan ‘¿cómo estás?’, ‘¿cómo te sentís?’. Eso me parece que es toda una enseñanza.
Así que, en la provincia de Buenos Aires, como esta escuela, que hemos reconstruido prácticamente, 500 escuelas más. 500 escuelas más. Las de Avellaneda son las más lindas, pero 500 escuelas más. Empezamos este período con 240 escuelas nuevas, edificios nuevos inaugurados. Mañana ya vamos a ir 245. Me dicen, 246. Seguimos abriendo escuelas en la Provincia.
Hay que disfrutar, hay que reconocer, hay que agradecer lo que uno tiene, pero hay que alegrarse también por lo que tienen los demás. Así que, que esto esté pasando en todo el territorio de la provincia de Buenos Aires, cuando nos dicen que el Estado no sirve, que hay que dinamitarlo, que hay que destruirlo, que hay que romperlo desde adentro, yo les quiero decir que les hablan mal del Estado, pero el Estado, ¿qué es? Es esta escuela, el Estado es esta escuela.
Y que no vamos a dejar entonces que lo destruyan, al Estado, ni a esta escuela. Y que no los vamos a dejar nosotros, los que tenemos responsabilidades de gobierno, pero cuando quieran destruir la escuela pública están las maestras, los maestros, la comunidad educativa, están los pibes y están las familias. Gracias.