Nuevas viviendas e infraestructura de salud y educativa en Carlos Casares
Buenos días, buenas tardes ya, a todos y a todas. Primero, agradecerle a Daniel, también a Walter cómo nos reciben cada vez que venimos a Casares. Para mí una alegría enorme acordarme cada una de esas visitas y todo lo que pude compartir con ustedes, reconociendo y ampliando los derechos de los vecinos y vecinas de Casares, durante varias visitas donde dimos saltos importantísimos. Pero la verdad que hoy, no sé por qué estamos en una suerte de maratón de derechos. Hoy, una maratón de derechos: vivienda, salud, educación, infraestructura, ambiente.
Y me parece, ya de por si, en cualquier situación, venir a entregar viviendas. Ahora voy a hablar de cada uno de los programas, de cada una de las entregas de hoy, pero quiero decir que, ya una concentración tan importante de programas, de reconocimientos, de inversiones, la verdad que emociona. Pero emociona mucho más, hoy cuando nos dimos un abrazo con Walter, emociona mucho más hacerlo en una situación como esta donde gobierna Milei. Ayer, algunos de ustedes, yo no, tengo que reconocer, yo no lo quise ni escuchar, lo voy a tener que hacer porque es la función que tengo pero, ¿saben qué? Me veía venir lo que después vi en los recortes, que iban a festejar.
Que nos iban a decir que hay una fiesta en la Argentina, que se han hecho muchísimas cosas y se han conseguido muchísimos logros. Se ve que ni Milei ni su equipo, ni los que le escriben los discursos recorren ni la provincia de Buenos Aires ni nada del territorio de la Argentina. Lo que hay ahí, Milei, son jubilados que no llegan a fin de mes, gente que ha perdido el laburo, problemas para comprar los remedios, los alimentos, no sé en qué país vive este tipo, pero lo que pasa en la Argentina, culpa de Milei, es que hemos caído y estamos en caída libre.
Así que mucha más emoción poder hacer estas cosas. Venimos de Pehuajó, donde entregamos también viviendas, Dani, y había dos terrenos. Hicimos el acto en el centro, en una calle, en un pavimento que también habíamos hecho, en un barrio que, como este, estaba creciendo gracias a las políticas públicas y de aquel lado estaban las viviendas terminadas, hermosas, la alegría de las familias por lo que estábamos entregando, y del otro lado, un terreno abandonado, un terreno baldío, donde tenían que haber estado las viviendas que había comenzado el Gobierno nacional y que interrumpió Milei. Una postal, una especie, yo decía esa frase de ‘una imagen vale más que mil palabras’. Las viviendas terminadas de un lado, el abandono, el baldío de Milei del otro. Nosotros queremos una Provincia con viviendas, con escuelas, con centros de salud, no con terrenos baldíos, no un Estado insensible, cruel, desertor de sus obligaciones. Así que hoy vamos a hablar un poco de esto, 36 viviendas en un barrio que va a terminar teniendo 300 viviendas. Le decía a Dani, que también estamos pensando y está pensando el Intendente en la cuestión de la salud, de la educación, de todo lo que involucra el hábitat, el desarrollo urbano, de todo lo que involucra poder vivir accediendo a los servicios básicos, a los derechos. Bueno, Dani acá construiste, si son 300 viviendas, 300 familias, haciendo algunos cálculos, han construido una pequeña ciudad de un pueblo, un pueblo nuevo producto de la política pública y del Estado presente.
Así que en un país donde faltan muchas cosas, pero sobre todo vivienda, la verdad que un enorme orgullo poder acompañarte. Hoy, la entrega de viviendas, la vivienda propia. Lo podría decir para cada uno de los programas que estamos anunciando. Pero ya lo ha dicho Dani, lo ha dicho Carli, lo ha dicho Alberto, hoy nos tratan de convencer de que todo esto debería ser sencillo de alcanzar, la vivienda propia, porque está disponible, porque el mercado lo ofrece. Es cierto, no hay duda, cualquiera va una constructora, a una inmobiliaria, habla con un arquitecto, habla con un ingeniero y te dice ‘sí, ¿querés la casa? La podemos tener’. Pero después viene la realidad, el terreno sale tanto medido en dólares, la construcción, no sé, 60, 70 millones de pesos, 70.000 dólares. Es decir, que ahí tenemos el engaña pichanga, la estafa y la mentira a la que nos quiere someter Milei. Porque más quiere que le creamos y que lo aplaudamos, que el mercado va a resolver todo, que no hace falta Estado, que con Estado cero estaríamos mejor.
Esto no es verdad acá en la provincia de Buenos Aires, no es verdad en Casares, no es verdad en ninguna provincia argentina, no es verdad en el país, no es verdad en Latinoamérica, no es verdad en el mundo. Lo que nos dicen es un verso pero que no se registra y no se comprueba en ningún lugar del planeta. Es cierto que el mercado está, es cierto que por lo privado el que tiene, no sé, 100.000 dólares puede tener una vivienda, pero la realidad es que el capitalismo que pone el mercado también genera muchísima desigualdad. En Estados Unidos, en la campaña electoral, había dos candidatos, los dos hablaron de la vivienda, una de ellas, la que perdió dijo ‘yo voy a hacer 3 millones de viviendas en Estados Unidos porque hay muchísimas familias que no tienen acceso a la vivienda’ y eso no lo discutía nadie. Como tampoco tienen, en Estados Unidos, principal potencia del mundo, ni acceso a la salud, ni acceso a la educación. No es verdad.
Y sí existe el mercado y la empresa privada, nada más que esto, este método de acceder a la educación, a la salud, a la vivienda a través de la empresa privada, en un mundo donde hay tanta desigualdad, funciona como una barrera y discrimina. No todos pueden. Podemos discutir teoría económica, podemos discutir Escuela Austríaca, pero vamos a la realidad. A nuestro pueblo decirle, ‘no hay problema, si necesitas una vivienda podés acceder porque la podés comprar’. Si todos saben, si todos sabemos que la enorme mayoría no tiene recursos y probablemente no los consiga en toda su vida. Y se va a esforzar, y va a laburar, y aún así no va a poder acceder a la vivienda propia. No podría acceder a la educación, no podría pagarse una universidad privada, no podría tener una prepaga que sale 300, 500 lucas por mes.
Milei, esa es la realidad, tu sistema, tu método, tu promesa es un verso que deja afuera a las enormes mayorías de la Argentina y no se va a solucionar dándole más plata a los que más tienen, a los timberos, a los más ricos, a los millonarios, todos esos que están felices. Ayer veíamos que había un festejo y una fiesta porque el otro engaño que hay es que la motosierra y el ajuste cayó para el laburante, cayó para el jubilado, pero no es un ajuste nada más, es una redistribución, es una reubicación de los recursos. Los más ricos de la Argentina están cada vez mejor con Milei, por eso festejan y lo aplauden, los que se dedican a la importación y no a la producción local, los que se dedican a la timba financiera, los que se dedican a saquear los recursos naturales de la Argentina están mejor con Milei, hacen bien en aplaudir.
Pero esa fiesta que ayer hacían deja afuera a todo el pueblo argentino y sobre todo, en la provincia de Buenos Aires, al interior de la provincia de Buenos Aires, a los que laburan, a los empresarios pyme, a los pequeños productores. Todo afuera. Es un país para muy pocos, por eso también, acompañado no solo de su ajuste sino también de un negacionismo. Ustedes saben que tenemos al único presidente del mundo, creo yo, que niega el cambio climático, Dani, no hay otro, al único presidente del mundo que niega la desigualdad y la violencia sobre las mujeres. Hubo un solo voto en las Naciones Unidas contra la violencia las mujeres y fue del gobierno de Milei (sic) y lo festejaban, es una vergüenza.
A la provincia de Buenos Aires, a mí, a nosotros no nos representa un tipo que niega los problemas que tiene el planeta, no nos representa. Así que hoy también trayendo estos camiones, este camión, estos instrumentos, las herramientas para las huertas en las escuelas. Bueno, el cuidado del ambiente que todos sabemos que es necesario, que es cultural, pero que requiere también inversión. Así que la provincia de Buenos Aires, única provincia que tiene un Ministerio de Ambiente, no lo cerramos y no lo vamos a cerrar, vamos a seguir invirtiendo en el cuidado del ambiente, el Conectar Igualdad bonaerense, ya lo explicaron bien.
Así que simplemente voy a decir, esos pibes y esas pibas también pueden ir a un negocio de computación, hay por todos lados, lo que pasa es que seguramente su familia, si ellos no tienen los recursos. Ahí se explica muy bien lo que significa el mercado, quieren la computadora, sí, la necesitan, les mejoraría su posibilidad de estudiar, de conocer, de formarse. Y algunos dicen, ‘no, pero se la dan para que jueguen y para que se diviertan’. Es para estudiar, es para formarse, es para trabajar, pero es también para pasarla bien porque los pibes y las pibas que no tienen esa guita también tienen derecho al entretenimiento, a ser felices.
En la provincia de Buenos Aires no nos da bronca que otro tenga y que otro acceda, porque eso es, también, el otro punto que me parece importantísimo. ¿Pueden comprarla? Sí, son libres, nos diría Milei, son libres, ya está, son libres ustedes de comprarse un avión privado. Claro, libertad hay, nadie lo prohíbe, el problema es que no alcanzan los recursos. Entonces si empezamos a medir cómo es esa libertad que predican, es una libertad para muy poquitos, es una libertad para los que tienen poder adquisitivo, recursos, para los millonarios, para los que más tienen, y lo demás tienen la libertad de comprar pero no la pueden ejercer. Por eso, a mí me gusta decir que sin igualdad de oportunidades y sin justicia social la libertad es un verso, la libertad es una mentira, es mostrarte en la cara lo que nunca vas a poder tener; tu vivienda, tu título universitario, tu computadora, lo que nunca vas a poder tener. Libre de sufrirlo, libre de mirarlo desde afuera, libre de quedarte al costado, pero es una libertad para muy pocos la que están predicando.
Por eso las computadoras del Conectar Igualdad, por eso también el Programa Puentes, con un aditamento que tiene que ver con el federalismo. Voy a mencionar el federalismo porque hoy tenemos a nivel nacional un presidente para el cual las provincias argentinas son una molestia y un estorbo, como se dijo alguna vez, son inviables. Dice ‘bueno, ustedes tienen que arreglarse solos, con lo que tienen’, nos lo dijeron cuando hubo un tornado en la provincia de Buenos Aires. Se habían caído 15.000 árboles, se habían volado 5.000 techos, fue Milei vestido ridículamente, se sentó ahí, le mostramos lo que estábamos haciendo desde temprano con el intendente, con la comunidad, con los bomberos voluntarios, con nuestras fuerzas y con nuestra inversión, le mostramos todo eso y dijo ‘bueno, arréglense con lo que tengan, arréglense con lo que tengan’.
No es así, no es eso gobernar un país. Hoy me acompañan, creo que 8 o 9 ministros de la provincia de Buenos Aires, Milei dijo ‘afuera un montón de ministerios’ y ahora sabemos por qué, porque venía a no laburar, a no hacer las cosas, porque son insensibles pero también son inútiles. Yo creo que si Milei quisiera hacer una sola de estas viviendas no tendría con quién ni tendría cómo, por eso cerró los ministerios, porque no se quiere ocupar de nada, porque no le importa nada.
Y el programa Puentes, como contaba Carli, recorriendo la Provincia, ahí recordábamos cuando estábamos en campaña que íbamos a los pueblos de la Provincia, te comentaban el drama de los pibes y pibas que llegan a la edad de terminar el secundario, y les preguntamos, acá hay gente del sistema educativo, bueno, está nuestro ministro, les preguntas, nos pasa siempre, Alberto, vas a un secundario, al último año y les preguntas y yo no sé, todos no, porque algunos no lo plantean, la mayoría seguro, dicen ‘yo quiero seguir estudiando, si pudiera quiero seguir estudiando’, ‘aspiro, sueño con tener un título universitario’. Muchos de ellos no, no todos, algunos tendrán otras inquietudes, está todo bien, pero hay muchos que quieren seguir estudiando en la universidad, ¿qué haríamos si no tuviéramos universidad pública y gratuita?
Por eso, por eso, cuando Milei se le agarró con la universidad pública y gratuita él decía ‘los pibes me votaron todos a mí porque los enganché con el Tik Tok’. No, Milei, fueron a la calle a protestar y a manifestar que no podés tocar la universidad.
Pero así y todo, con las universidades públicas y gratuitas no se llega a todos los pueblos. En los pueblos de la provincia de Buenos Aires muchas veces para estudiar hay que irse a otra ciudad, así que sobre lo que cuestan los estudios en esfuerzo, en dinero de las familias, hay que mudarse a otro lugar, irse a otro pueblo, ir y volver, lo cual también constituye una barrera y un límite para muchísimas familias que no lo pueden costear. Pero para los que pueden costearlo también significa un desgarro, ¿no? Se va tu pibe, tu piba a estudiar afuera de la ciudad y después no sabes si vuelve, inicia, bueno, rompe familias a veces, separa familias, es para el progreso, pero bueno, es el desarraigo, lo que llamamos desarraigo. Por eso era importantísimo para nosotros, y como dice Daniel, no prometimos hacer ni uno, porque no nos gustan las promesas. No nos gustan las promesas, menos, veníamos de Macri y Vidal que habían prometido 3.000 jardines de infantes y no hicieron uno y dijeron ‘lo vamos a hacer con la plata del Fútbol para Todos’, así que nos dejaron sin partidos de fútbol y sin jardines de infantes. Sin jardines de infantes.
No prometimos ni uno, pero inauguramos hoy la sede del Programa Puentes, los centros universitarios número 31 en la provincia de Buenos Aires, para que no haya que irse a estudiar afuera. No cubre todo, pero es importante porque es pensar en nuestro interior. Porque el desarraigo tiene esto, Dani, me viene a la cabeza, también se van, bueno algunos hablan de fuga de cerebros cuando se van los científicos al exterior, como lo que está pasando hoy con el CONICET de Milei, cerrando posibilidad, dejando de invertir, se van a estudiar o se van a laburar afuera nuestros científicos. Bueno, lo mismo pasa en los pueblos, que se van los pibes y las pibas y después a veces no vuelven, se necesita, entonces hay que darle esas oportunidades.
Por eso el programa Puentes, pero por eso, también, pensando en el interior federal, nosotros camino rurales, programa Puentes, Casas de la provincia de Buenos Aires. Dani, es cierto, nos han criticado mucho. Por acá andaba Cristina Álvarez Rodríguez, la jefa de Asesores, después llegó también el ministro de Salud, el ministro de Salud Nicolás Kreplak. Gracias, Nico. También mencionamos a los intendentes e intendentas, pero está Nacho ahí, de Yrigoyen.
Así que, bueno, las Casas de la provincia de Buenos Aires, ¡lo que nos criticaron! ‘Van a invertir en hacer unos edificios en los pueblos del interior’. Claro, nos criticaban de los canales porteños, que no tienen ni la más remota idea de qué se trata, de qué se trata la provincia de Buenos Aires, ni la menor idea tienen. Entonces no saben lo que es y lo que pasa con un Estado provincial, que está de prestado en una oficina municipal o tal vez alquila. Entonces tenemos presencia del Estado municipal toda dispersa, en condiciones espantosas de trabajo. Para nosotros era importante esto de las Casas de la Provincia sobre todo, porque nos criticaban ‘van a invertir en una Casa de la Provincia’, y ahí nos dimos cuenta que la Provincia tenía una Casa de la Provincia. La Casa de la provincia de Buenos Aires estaba en la Capital Federal, ahí en la calle Callao y era para que los porteños puedan hacer los trámites de la Provincia en un lugar lindo, en un lugar céntrico y nadie se quejaba de esa Casa de la Provincia. Nadie se quejaba y ahí no era ni una inversión en balde, ni era un despilfarro, estaba bien porque era para los porteños. Bueno, ahora no. Estamos construyendo 69 Casas de la provincia de Buenos Aires en los pueblos del interior y esta es la décima, Dani, la décima casa que inauguramos.
Y termino contando lo que vinimos a hacer, porque una Casa de la Provincia ya da para un viaje, viviendas da para un viaje. Hoy, como si todo esto fuera poco, parezco los vendedores ambulantes ya, como si esto fuera poco sale un Centro de Atención Primaria de la Salud, un CAPS. Ahora lo vamos a recorrer, Nico. Es una política que, también, podría hablar un rato largo, porque no es solo un edificio, es una política. Es una política llevar la salud a los barrios, descentralizar nuestro sistema de salud para que no sea solo el hospital, pero para esto no alcanza con tener una salita de primeros auxilios. No alcanza con un botiquín, una enfermera, un médico que a veces va. Y entonces tenés la salita de primeros auxilios más cerca, pero una atención muy limitada. Los Centros de Atención Primaria de la Salud, Dani, vos lo dijiste muy bien, son un pequeño hospital de 6 consultorios, odontología, ginecología, obstetricia, laboratorio, la historia clínica digital, todo, la computadora.
La verdad que representa una mirada de la salud donde la salud tiene que ir a la gente. Por lo que dijo Dani, nos van a decir, ‘bueno, ponen un montón de guita’. Te ahorras plata, te ahorras plata, ellos que dicen que son eficientes, haciendo educación en salud y prevención en salud. Es muy importante. Por eso también tiene un salón de usos múltiples para que se pueda usar también de lugar de formación y capacitación y prevención en salud en toda la provincia. Lo van a ver, es hermoso, es maravilloso y a mí me llena de orgullo de que este en Casares, de que este en nuestro interior, un interior del que no nos íbamos a olvidar porque no hay bonaerense de primera y bonaerense de segunda.
Y termino con esto, el mercado no te va a solucionar ni la salud, ¿acá qué prestadores de salud tenés? El Estado. El Estado. Y si se cierra ese hospital, y si se corre el prestador municipal, si se corre el Estado no queda nadie, porque no es negocio atender la salud en lugares distantes para hacer guita. Por lo tanto, nosotros estamos convencidos de que el pueblo de la provincia de Buenos Aires comparte esta idea de que hay que ser solidario, de que hay que tener un Estado presente y que hay que dedicarse a construir una alternativa política que pueda gobernar la Argentina en base a los intereses de las grandes mayorías, con salud, con educación, con vivienda, con ambiente, con computadoras para los pibes, con igualdad de oportunidades y con justicia social. Muchísimas gracias.