Recorrida por sala de mamografía en el Hospital Petrona V Cordero de San Fernando
Muchas gracias, Juan. Juan. Los Juanes. Muchísimas gracias a todos los presentes también por concurrir, por estar acá, por el acompañamiento, por el afecto. La verdad que está atravesando la Argentina momentos, permítame decirlo, dramáticos, muy excepcionales. Las imágenes que veíamos ayer, hay mucho para decir, no es el contexto, no es el lugar, pero sí quiero decir que ayer, claramente, no se discutió cómo mejorarle la salud al pueblo argentino. Eso queda claro, ¿no?
Se hablaron varias cosas, se resolvieron varias cosas a espaldas de todos nosotros, lo veíamos por la tele, no se estaba hablando de la salud, de la educación, del trabajo, de la producción del pueblo argentino. Así que, para mí es un verdadero orgullo poder hacer esto que hacemos todos los santo días, Nico.
Ayer estuvimos en Juárez, estuvimos en Rosales, en Punta Alta, pero todos estos días, campaña no campaña, y aprovecho para pedir también un aplauso a nuestro candidato, que el 26 de octubre nos va a representar, Sebastián Galmarini. Gracias por venir, Seba.
Hoy estamos haciendo un anuncio importante, pero que evidentemente no se hace como un golpe en el aire. No es ni una cuestión de efecto, ni una cuestión, llamémosla, oportunista ni nada parecido, porque a veces parece. A veces nos dicen ‘bueno, pero el Gobierno nacional va abandonando cosas, se ausenta’, deserta -a mí me gusta decir- el Gobierno nacional, porque una cosa es no estar en un lugar donde si querés vas, si no querés no. Una cosa es no ocuparte de cuestiones que te interesan o no te interesan, pero una cosa distinta es que el Gobierno nacional, el presidente de la Nación, decreten de manera absolutamente arbitraria y absolutamente ilegal que hay cuestiones que no son atribuciones u obligaciones del Gobierno nacional.
Nosotros tenemos una estructura política en la Argentina desde la época ya bien pasada de la unidad nacional, donde las provincias que existían se unieron para armar un país. Y cuando armaron ese país, resolvieron delegarle al Gobierno nacional, dejar en manos del Gobierno nacional, cuestiones que antes tenían que hacer las provincias, incluso nuestra propia Provincia, que tuvo una época de país prácticamente independiente, lo de Caseros, nos separamos y armamos un Estado separado que, después, con el tiempo y con varias batallas de por medio, resolvió configurarse en lo que hoy conocemos como Argentina, Unidad Nacional, una Constitución Nacional que cumplir, obligaciones, derechos y también recursos. Y también recursos, porque una de las cuestiones centrales, lo quiero decir porque cuando uno dice, ‘cerraron el Instituto Nacional del Cáncer’ o ‘están desfinanciando las universidades, o el CONICET, o el Garrahan, o la cultura nacional’, bueno, las están desfinanciando y uno dice, bueno, está bien, el Presidente de la Nación tiene un esquema ideológico, tiene sus ideas que no ocultó en la campaña, por supuesto, que no sabían muchos que lo votaron que iba a desencadenarse lo que hoy estamos viendo, ¿no? Y lo votaron un poco inadvertidamente o como una apuesta, o depositando ahí cuestiones que no tienen que ver con lo que después ocurrió, porque esto era contra la casta.
Yo preguntaba recién cuánto sale un estudio, una mamografía por privado, por privado, para discutir modelos, no en el pizarrón, ¿no?, no en la filmina, para discutir modelos o discutir propuestas reales, concretas para el argentino. Y bueno, ¿pueden todas las mujeres que necesitan y que hoy ha quedado demostrado que es conveniente que se haga incluso desde una edad más temprana, estamos ampliando, pueden hacerlo? No, hay millones de familias, de mujeres que si lo tienen que hacer por el bendito mercado simplemente se quedarían afuera. O sea, que puede eso desencadenar una situación de enfermedad y muerte, no estamos hablando de cosas menores, estamos diciendo que hay un modelo, que es el que pregona el presidente de la Nación que dice, ‘bueno, yo ahora conseguí una guita, pero es para la timba o es para sostener el tipo de cambio, no para la salud, no para la educación, de eso no me tengo que ocupar’. El subtexto es ‘de eso no se tiene que ocupar el Gobierno nacional’, de la educación tampoco, no se tiene que ocupar el Gobierno nacional, y dirían, ‘no se tiene que ocupar el Estado’, que es un objetivo prácticamente militar del Gobierno actual.
Ellos dicen con una metáfora un poquito menos cruenta que son el topo que van a destruir, la palabra ‘destrucción’, el Estado desde adentro, ¿no? Están haciendo eso, destruyen y lo están destruyendo. Pero, ¿cuáles son las consecuencias? ¿Y cuál es la alternativa? Porque si no se puede tratar de analizar o considerar una idea aisladamente y decir, bueno, vienen a destruir el Estado y lo están destruyendo, entonces cierran organismos, van contra el INTA, el INTI, contra la universidad pública, que acá hay, me parece, ¿no?, pibes y pibas de la universidad por ahí, de secundario, bueno, mejor todavía, de secundario.
La educación pública en general, bajo ataque, no bajo abandono solamente, sino bajo ataque, equipado además y acompañado de una retórica, de un discurso que además los acusa a los médicos del Garrahan, o los trabajadores del Garrahan de ser culpable de cosas, a los profesores universitarios. Es decir, que hay una agresión, una agresión en lo verbal, una agresión en lo presupuestario y, después, pasan otro tipo de agresiones también.
Ahora, ¿cuál es el modelo que nos están ofreciendo? Primero, de niveles de gobierno, porque nosotros estamos tratando de integrar el sistema de salud. Acá estamos con el intendente, que está involucrado en el sistema, la parte en el subsistema de salud pública estatal provincial, como nosotros tratamos de estarlo en el municipal, también con el privado y también con el de las obras sociales. Integrar, darle racionalidad, utilizar mejor los recursos, articular mejor entre los diferentes elementos que componen el sistema de la salud en general, y que atienden y responden los problemas de salud y, también, las cuestiones de prevención en salud, toda la salud de la población.
Bueno, ¿qué es lo que nos están diciendo a nivel nacional? Nos están diciendo que nada de eso es incumbencia del presidente de la Nación y sus ministros. Porque sus ministros, las autoridades del Gobierno nacional, son prácticamente atributos del presidente de la Nación, son los colaboradores del presidente de la Nación, que no tiene nada que ver, que no importa.
Entonces, yo quiero partir de la realidad y de las bases y, mínimamente, de las cuestiones históricas. Nosotros como provincia, y las demás provincias también, delegamos en el Gobierno nacional, o le trasladamos al Gobierno nacional, determinadas responsabilidades, determinadas atribuciones y tuvimos el decoro de escribirlo en un lugar, qué parte tenía que hacer la Nación. Escribirlo, no es un acuerdo oral o nos juntamos un rato, las provincias y el Gobierno y dijeron o dijimos, ‘ustedes hacen esto, nosotros hacemos aquello’. Está escrito en un lugar, que ese es el gran problema y lo que se está ignorando. Ese lugar se llama la Constitución de la Nación Argentina. Lo que están haciendo es incumplir sus responsabilidades consagradas por la Constitución Nacional. Desde los artículos que dicen, aunque no le guste al presidente de la Nación por su ideología, no le guste o su ideología choca con nuestra Constitución. Porque nuestra Constitución dice que hay determinados derechos que son derechos sociales, derechos laborales, derechos universales, que él no está de acuerdo y que los autores que lee, y que nadie conoce, solo él, no están de acuerdo. Y entonces cree que puede hacer eso y ponerlo en práctica.
Pero decía, dos elementos, hay obligaciones o hay atribuciones o hay funciones que cumple el Estado nacional y otras que cumple el Estado provincial y otras que cumple el Estado municipal y otras que hacen los privados. Bueno, eso está establecido, pero además, hay alguna de esas que son concurrentes, son responsabilidades concurrentes que no hace ni plenamente el Estado municipal ni plenamente el Estado provincial, sino que lo hacemos juntos, entre ambos, que exigen una coordinación, exigen que yo le diga a Juan ‘¿qué necesitás?’ o que nos hablemos de alguna manera.
Entonces, primera cuestión, no puede el presidente decidir que no habla con determinados gobernadores porque no está de acuerdo. Y yo la verdad que no veo un placer y un goce en encontrarme con Milei en una reunión, pero lo vuelvo a decir: Presidente de la Nación, usted tiene que reunirse con el gobernador de la Provincia, porque tenemos responsabilidades y obligaciones que cumplir y nosotros no la podemos cumplir solos.
Entonces, no es que dicen, ‘lo domó entonces le pide ayuda’. No, ¿qué le pide ayuda? Tiene que cumplir la Constitución Nacional, y la Constitución Nacional le atribuye, le da y lo obliga a determinadas cuestiones que no está cumpliendo. Y digo, para que quede más claro y me han mirado desde un perfil económico, no es que eso lo tiene que hacer gratis o de onda el Gobierno nacional. La provincia de Buenos Aires es 40%, más o menos, de la población argentina, contiene el 50% de la industria argentina, produce más o menos el 40% de la riqueza que hace cada año la República Argentina. La producimos en nuestra provincia, los bonaerenses. Y de eso, hay una parte que se detrae, por esos compromisos, incluso por los pactos preexistentes esos que menciona la Constitución, hay una parte de esos recursos que genera nuestra provincia con el trabajo de nuestra provincia, con el consumo de nuestra provincia que va a parar al Gobierno nacional por delegación. Recauda el Gobierno nacional, pero no es del Gobierno nacional para que haga lo que quiera, no es para pagar una tasa de interés multimillonaria a los timberos amigos del Gobierno nacional, no es para conseguir los dólares para que después se escapen y se vayan con la fuga de capitales. No es para eso que contribuimos con nuestros recursos. Contribuimos para que se ocupe de la salud, de la educación, y contribuimos no en una proporción menor o despreciable, la provincia de Buenos Aires explica aproximadamente el 40% de la recaudación tributaria nacional, de todo el país, de todos los recursos que se juntan en la Argentina. Una parte de eso, obviamente, lo recauda la AFIP pero no es de la AFIP ni es de Milei, no es de la AFIP ni es de Milei.
Porque esos recursos, fíjense, hay una parte que vuelven, a través de diferentes instrumentos, de diferentes mecanismos, uno de ellos, el más conocido, es la coparticipación. Hay impuestos, que son impuestos nacionales, que se distribuyen entre la Nación y las provincias, pero la Nación se queda un pedazo antes, no para hacer lo que quiera y no hacer nada en el territorio nacional. Tiene obligaciones que no está cumpliendo y hay recursos que le damos. Esto, por eso, es grave, muy grave, que cierren el Instituto Nacional del Cáncer, que vayan contra la educación pública, que dejen de distribuir vacunas o que dejen de distribuir medicamentos, porque la plata se la damos y la producimos nosotros. ¿Qué hacen con esa plata? ¿Para qué la usan? Y ya lo estamos viendo de manera obscena. ¿De quién creen que es esa plata, esos recursos, ese esfuerzo, si le gusta llamarlo así? De ese 40% que nosotros aportamos, siempre se dice, ‘bueno, aportamos el 40 a la coparticipación, la Provincia está mal retribuida en esto, hay una inequidad porque recibe solo el 22 de la coparticipación’. Pero antes de que los recursos vayan a la coparticipación, hay una porción que se queda el Gobierno nacional, que tampoco es para que lo rife a la marchanta.
O sea, que si somos estrictos en los números, aportamos el 40 del todo y recibimos el 7. Porque antes de repartir el 22 entre todas las provincias, hay una parte que ya se quedó el Gobierno nacional y recibimos el 7.
Entonces, después dicen a la Provincia, ‘bueno, no hizo las obras, falta tal cosa, falta tal otra’. Y bueno, claro, hay una enorme inequidad en esto porque aportamos el 40 y recibimos el 7, entre lo que se queda en Nación, que históricamente esa parte que se queda en Nación volvía de alguna manera a las provincias, a la población que labura, que produce, tanto que les gusta hablar de esta manera.
Ahora no vuelve nada, pero no vuelve nada, no porque vuelva a mí, al intendente, al ministro, no vuelve nada al pueblo. Se la quedan. Toda esa masa de recursos, toda esa masa de riqueza que producimos nosotros, se la quedan ellos para hacer lo que se les canta, porque así han interpretado que funciona el sistema. Y no funciona así, están incumpliendo deberes, por eso hemos ido a la Corte Suprema y, por eso, le reclamamos en las calles y, por eso, cada vez que agarramos un micrófono reclamamos la deuda que tienen con la provincia de Buenos Aires.
Pero digo más, digo más, se lo hemos reclamado de casi todas las formas posibles. El 7 de septiembre, a nuestro reclamo se sumó el pueblo entero de la provincia de Buenos Aires. Venían a arrasar, venían a no sé qué, 14 puntos de diferencia hubo en la elección y eso es resultado del desprecio, del destrato, de la desinversión, de la indiferencia, de haberse ausentado, de haberse borrado, no están, ¿con qué cara vienen a la provincia de Buenos Aires hoy a pedir el voto? Bueno, no quiero decir con qué cara de la que quedó en la boleta, eh. Quiero decir, ¿con qué cara? ¿Con qué legitimidad pueden hacerlo?
Entonces, quería hacer esta introducción y decir que es otra estafa más. Recibir los recursos desde el Gobierno nacional, que son para hacer las rutas nacionales que pasan por nuestro territorio, no las hacen. Para terminar… 1.000 obras dejaron, 16.000 casas. Esto en obras, pero dejaron de dar y distribuir equipamiento, que no era de una dádiva, no era una cuestión arbitraria sino que era una función que estaban cumpliendo y una obligación que tenían, que pasaron a incumplir por una cuestión ideológica del presidente de la Nación. Bueno, a esa ideología también la estamos rechazando, si estas son las consecuencias que está teniendo.
Por eso para mí es tan importante lo de hoy. Voy al tema, hoy estamos ampliando la cobertura, por eso, repito, hay una cuestión del orden institucional de la Argentina, de la Constitución, de las leyes que no se están respetando. Así que, yo le digo al presidente que crea lo que quiera, que piense lo que quiera, que tenga los amigos que quiera, pero adentro de la Constitución tiene que funcionar, no afuera de la Constitución. Tiene que cumplir sus obligaciones con la Provincia, con el pueblo de la Provincia. Y no es algo desproporcionado que le estamos pidiendo, porque los recursos se ponen todos los días y se van a no sé dónde y nos faltan a nosotros.
Y estamos en medio de una crisis enorme del turismo, que estábamos el otro día en la costa, de la industria, del comercio, está todo parado en la provincia de Buenos Aires, ergo en la República Argentina, menos unas pocas actividades que tienen que ver con el extractivismo o con la timba. Pero todo lo demás está parado y es la vida de la gente. Entonces, esto es lo que está en juego.
Por eso tan importante este anuncio también, que tiene que ver con lo público y lo privado, como tantas cosas que venimos discutiendo, un poco superficialmente, por TikTok, porque andan con una motosierra diciendo barbaridades, pero la realidad es esta. La realidad es que si no hubiera salud pública, si no hubiera escuela pública, si no hubiera universidad pública, si no hubiera obra pública, hay millones de personas que quedarían excluidas y más excluidas. En una situación global, mundial de desigualdad muy agravada después de la pandemia, además, de mucha mucha desigualdad y cada vez más desigualdad, los ricos cada vez más ricos, los pobres cada vez más pobres y la clase media hoy en riesgo de extinción en la Argentina, y en buena parte del continente, la llamada clase media que es el laburante formal, todo eso está en riesgo, todo eso está en riesgo. Ahora bien, ¿qué nos dicen? ‘No importa, porque igual el Estado no tiene que existir, mejor si no existe. El Estado era el que le ponía una traba, un yugo, un límite, la pata encima al privado’. Ahora, ¿qué es lo que ve en la realidad? Que han retirado al Estado y la inversión está por el piso, el consumo está por el piso, la rentabilidad está por el piso. Eso no ha pasado del lado de lo privado, pero peor que eso, convidan, invitan a nuestra población a resolver todo por privado. Por la suya. Puesto así más en general, sálvese quien pueda. Puesto en concreto, bueno, ¿cuánto sale hacerse los controles? ¿Cuánto sale una prepaga? ¿Cuánto sale una universidad privada, una escuela privada? No las que subsidiamos nosotros, porque quiero decir también que hay un tema terminológico que quiero empezar a aclarar, que es que la enorme mayoría de las llamadas ‘escuelas privadas’ de la provincia de Buenos Aires se manejan, funcionan con subsidio del Gobierno de la provincia de Buenos Aires. Pagamos los sueldos nosotros y no es un reclamo, ni al César lo que es del César, es simplemente poner las cartas sobre la mesa para ver a dónde nos lleva lo que están proponiendo.
Todo por privado, cada uno por la suya y entonces ¿qué es la libertad? ¿En qué se convierte? En que el que tiene la billetera gorda, el bolsillo grande, bueno, es libre de hacer montones de cosas. Y el que no lo tiene, bueno, está sin laburo, está sin escuela, está sin salud. ¿Qué libertad sería esa? La libertad de morirse de hambre, la libertad de padecer enfermedades. Y fíjense que no es una amenaza, ¿no? Como la que oíamos ayer desde la Casa Blanca. No es una amenaza. Esto no es una extorsión, una amenaza. Es simplemente explicar la realidad de lo que pasa, que Juan decía muy claramente, hoy tenemos un incremento enorme de las prestaciones que tiene que dar el sistema de salud pública porque cada vez menos, cada vez menos desde que llegó Milei, por privado se pueden resolver los problemas. Porque nadie, hay un sector enorme de la población, que no puede pagar el alquiler, o que no puede pagar al mismo tiempo los servicios, o que no puede pagarse la salud, no puede pagarse una consulta y no puede pagarse un remedio. Y ¿a dónde va? Al hospital. ¿A dónde va? Al centro de atención primaria de la salud, a la salita. Van a buscar al Gobierno municipal, van a buscar al Gobierno provincial. Y nosotros, bueno, la verdad que hacemos un esfuerzo enorme, que es lo que estamos un poco poniendo en valor, nos ha aumentado 35%, en algunos lugares 65%, la cantidad de consulta, o la cantidad de prestaciones que tenemos que dar porque el que antes lo hacía por privado ahora no puede, o le sacaron los remedios del PAMI gratis, o no puede, no puedo y vienen al Estado.
A mí me gusta decir, venían a privatizar todo y están estatizando. Porque cada vez más gente tiene que recaer, y tiene que recaer, y tiene que confiar y tiene que atenderse en el sector público. Entonces, cada vez más Estado. Cada vez más Estado, pero sin recursos quiere que lo hagamos. Entonces, ese es el gran dilema.
Dije, se lo dijimos en el micrófono, se lo decimos en todas las tribunas que tenemos, se lo decimos en la tele, se lo decimos en los actos, se lo hemos dicho acompañando a los que luchan en la calle, ahora hay que decírselo el 26 de octubre en las urnas. Con toda crudeza y con toda claridad.
Hoy lo que estamos haciendo es ampliar, por una recomendación que tiene que ver con un estudio, con estudios serios, científicos que nos hacen, ampliar la edad, ampliar el rango etario en el que hay que llevar adelante controles vinculados con el cáncer de mama, que es, como bien dijo Nico, una causa entre las más relevantes de muerte en mujeres y de muerte en cáncer en general, que obviamente tiene un peso muy importante dentro de las prestaciones en oncología que tenemos que hacer desde la provincia de Buenos Aires. Y esto no es, como decía, un anuncio en el vacío, un anuncio de ocasión, sino que viene a coronar, viene a ser el resultado de un trabajo de inversión, un trabajo de ampliación de las capacidades del sector público, de equipamiento.
Nico cuenta una parte, pero venimos haciendo varias cosas. Nosotros, en el tema de diagnósticos por imágenes, es la cuestión, por un lado, de tener el equipamiento. Hemos ampliado de una manera, 46% más el equipamiento. Mamógrafo es cierto, en cada hospital que vamos vemos cómo lo podemos ir incrementando, pero además forma parte de una red, que lo que dice Nico, también tiene que ver con que es directamente tecnología digital o se digitaliza, eso va a la historia clínica digital que tenemos en la provincia de Buenos Aires, que ya tiene 9 millones de ingresos.
Y después también, los centros provinciales de diagnóstico por imágenes, el diagnóstico por imágenes remoto, que permite que en lugares donde no tenemos tal vez los especialistas a toda hora se puede hacer a través de tecnología, la interconsulta, y entonces inmediatamente y no hace falta que alguien esté de guardia. En los pueblos del interior pasa mucho, que está el equipamiento pero que tal vez el profesional no está con la disponibilidad permanente que necesitamos, entonces se puede hacer de alguna manera consultando profesionales que están disponibles todo el tiempo.
Así que, es un conjunto de decisiones que además vienen a acompañar las inversiones en infraestructura que estamos haciendo en nuestro sistema público de salud, no se hacía hace añares. A veces alguien decía, ‘bueno, vamos a hacer algo, le ponemos una guardia afuera, la injertamos en el hospital’. Hay lugares donde trataron de hacer guardias que ni estaban conectadas con el hospital y que no se condecían con las capacidades y con la infraestructura del propio hospital. Bueno, eso, cuestiones absolutamente equivocadas, electoralistas y, finalmente, tontas, de despilfarro.
Así que estamos llevando adelante un plan que ahora tiene como riesgo, lo tengo que decir también, la situación que se empieza a configurar por la política económica nacional, por sus resultados en materia presupuestaria. La verdad que la gente la está pasando mal, en general, no llega a fin de mes, lo que más se escucha, ‘tengo cerrado’, parado, suspensiones, quiebra, bueno, estamos viendo todo eso, obviamente eso impacta también en los presupuestos.
Y nosotros con esta predisposición permanente de dar una respuesta, de dar una atención, de un Estado presente, algunos decían, ‘bueno, el Estado presente ya no le importa a nadie’. El Estado presente es fundamental y es esto que estamos haciendo con un esfuerzo muy grande. Me dicen, bueno, Nico que se olvidó de anunciar, así que por cucaracha me avisan lo de la maratón de mamografías, que es hoy, mañana y pasado con horario extendido en todo el sistema público sin turno previo. O sea, que también una política para concientizar.
Y digo, a los amantes de la motosierra y de las tijeras, les digo que es más barato finalmente hacer prevención, extender, es más barato, el Estado, además, tiene, lo que pasa es que implica una mayor presencia, implica una política, bueno, todo lo que odian, pero termina siendo un ahorro en todo sentido para la sociedad, lo paguen como lo paguen, en su sistema en su sistema de salud, poder hacer un diagnóstico temprano y entonces dar una respuesta más eficaz.
Por eso, bueno, hoy con este anuncio termino diciendo que nosotros hacemos la inversión, traemos el equipamiento, pero lo más importante que tiene el sistema de salud son sus trabajadores y trabajadoras.
Así que, bueno, muchísimas gracias. Gracias, Juan. Gracias, Nico. Gracias, Juan, gracias. Y la verdad que un anuncio importante, ahora tenemos que dedicarnos a difundirlo, a convertirlo en una práctica corriente que esté en toda la provincia, que se empieza a hacer. Nuestra provincia es también pionera en esto.
Somos la primera provincia que extendemos la edad, pero tampoco es tan raro porque en ausencia del Gobierno nacional ahora empiezan a tener un papel rector y un papel promotor distinto las provincias, en ausencia del Gobierno nacional. A mí no me da esto ni alegría ni orgullo, no se puede, la verdad es que no se puede, es lo último que digo, no es que se ausenta el Gobierno nacional, bueno, agarramos todo nosotros. Hay cosas que no tiene sentido que se hagan a nivel de gobernación o a nivel de provincia, porque tienen que ser políticas nacionales, que de no ser nacionales, todo se complejiza más, la promoción, la publicidad, la inversión, todo se complejiza más.
Así que, termino con esta apelación de nuevo al presidente de la Nación, un simple mensaje, que me parece que es el de las urnas del 7 de septiembre y que es lo que tenemos que seguir transmitiéndole al presidente, que puede tener los amigos que quiera, pasear por los países que sea, pero su responsabilidad y su obligación es con el pueblo argentino.
Tiene que cumplir con la Argentina, con el federalismo, con las provincias y, bueno, y esperamos realmente, sinceramente, esperamos que el 26 de octubre escuche las urnas como no las escuchó en septiembre. Así que bueno, muchas gracias.