Acto por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora
¿Qué agregar, no? Si a Vero le costaba después de Estela… Para los que dicen, o para los que creen, o para los que tratan de no ver la polenta que tienen nuestras mujeres dirigentes, dirigentas, mejor dicho. La verdad que lleno de fuerza en un contexto complejo, en un contexto difícil, pero lleno de fuerza porque hoy vamos a demostrar que no alcanza con discursos terraplanistas, con discursos, a veces, de crueldad, de odio, de insensibilidad para parar, para desmovilizar y para anestesiar lo que es una lucha del pueblo argentino que llevan adelante nuestras mujeres. Así que hoy, un día donde lo que tengo que decir es muchísimas gracias por lo que nos van a mostrar hoy y por lo que vienen mostrando.
Agrego unos muy breves comentarios sobre lo que se estaba diciendo. Primero, creo que la provincia de Buenos Aires es la única que tiene, hoy, un Ministerio de las Mujeres. Algunos pensarán que, entonces, van ganando en esta batalla. Yo, lo que quiero decir, es que queda la llama prendida en la provincia de Buenos Aires para que vuelva a haber un Ministerio de las Mujeres a nivel nacional, para que lo tengan todas las provincias argentinas. Y creo que se ha hecho un trabajo inmenso, así como también Daniela sostiene nuestro Ministerio de Ambiente, en la provincia de Buenos Aires no nos van a hacer cambiar de idea simplemente con violencia, agresión, o persiguiendo en las redes.
Creemos que la tarea que se ha hecho, el trabajo que se ha hecho, es una construcción que va a quedar, que está modificando la forma de gobernar. No sólo a nivel del Gobierno provincial, sino en cada uno de los municipios. Decíamos que el desafío más grande era no encapsular, no aislar las políticas de género al Ministerio de las Mujeres, sino llevarlo de manera horizontal, a todos los ministerios y a todas las políticas de Estado. A 4 años de trabajo, creo que lo hemos conseguido, Estela. Así que felicitaciones porque hoy es una política transversal a los ministerios. Y vertical, porque también hemos logrado, desde el Gobierno provincial, que en todos los municipios, que en todos los gobiernos municipales, se lleven adelante políticas coordinadas con el Gobierno de la provincia, a punto tal que no sólo tenemos grandes intendentas, como vemos acá, sino que tenemos, en toda la provincia de Buenos Aires, secretarías específicas y también políticas de género que le dan fuerza al trabajo provincial.
Es muy difícil, a veces, discutir con posiciones tan retrógradas y tan negadoras. Vemos que mientras se intenta sostener que ni siquiera hay brechas salariales, que ni siquiera hay cuestiones específicas, violencias específicas, vemos que las políticas que se están aplicado, como cada vez que hay una crisis, cada vez que hay un ajuste, al tiempo que niegan el lugar, el papel y la desigualdad con que las mujeres tienen que llevar su vida cotidiana, terminan reposando, recayendo en quienes son las que finalmente más hacen cuando hay crisis para cuidar al pueblo, para cuidar a las familias, para cuidar a la Provincia. Es imposible no ver cómo las agresiones que lleva adelante el Gobierno nacional, no sólo con las políticas de Estado, sino con los resultados y los efectos de la política económica, descargan con mayor fuerza sobre las mujeres de la provincia de Buenos Aires. Es difícil, es imposible no verlo.
Y creo que, entonces, no es sólo el cierre del Ministerio nacional, no es sólo el ajuste sobre diferentes programas, como el Acompañar, que tanto hemos utilizado y que tan importante ha sido, como cada una de las políticas nacionales, con la Línea 144, que empiezan a ausentarse, generan todavía más presión sobre las familias y, también, sobre nuestro gobierno. Pero es imposible no ver cómo el cierre de los comedores, políticas reales, políticas efectivas que el Gobierno nacional de Milei ya ha recortado, no sólo los comedores, sino lo que se ha dicho y lo que se pretende hacer con las moratorias. Lo decía Estela recién, y creo que lo vamos a empezar a sufrir en la provincia de Buenos Aires si siguen avanzando sobre nuestro sistema previsional. Pero es imposible no ver cómo los comedores escolares cerrados, le generan todavía más carga a las mujeres bonaerenses. Cómo, cada vez que van contra las moratorias y dicen estas barbaridades, estas barbaridades que van contra la realidad y contra la evidencia. Las moratorias, lo tenemos que decir una y mil veces, son políticas de igualación, ahí donde las políticas y donde las épocas de neoliberalismo dejaron y privaron de derechos a las mujeres y a las familias argentinas. Bueno, vinieron las moratorias, no para pagarle una jubilación a aquellos que no trabajaron, ‘que no agarraron la pala’, como dicen ahora, sino exactamente al revés. Aquellas que, sin haber, sin haber dejado un sólo día de trabajar, no tuvieron los aportes. Le decimos al Presidente, desde acá, que la culpa es de los que hoy defiende él, no de las mujeres bonaerenses.
Otro tanto, el ajuste en escuelas, en hospitales, en salud y en educación. Esos que quieren negar las tareas de cuidado, no remuneradas, tan injustamente distribuidas. Y bueno, cuando se va la escuela pública, cuando se va la salud pública, bueno, todo eso cae en las espaldas de las familias, de los laburantes, pero sobre todo de las mujeres. Esto es histórico. Por eso, en un día como el de hoy, reconocer las situaciones de violencia, reconocer las situaciones de desigualdad, decirles a las mujeres bonaerenses que contamos con ellas, pero que desde el Gobierno de la provincia de Buenos Aires vamos a seguir con todo lo que tengamos, apoyándolas con nuestras políticas, pero sobre todo, apoyando sus luchas que son las que permitieron que muchos que venían ciegos o distraídos abran los ojos y tengan que acompañar. Son esas luchas las que van a tener hoy una expresión, las que han permitido reconocer y recuperar derechos. Sin luchas, no hay derechos. Así que feliz día de lucha. Muchas gracias.