Entrega de patrulleros en La Plata

Así que acá estamos, acá estamos más bien pasando para rendir cuenta de lo que se viene haciendo en La Plata en materia de seguridad que es un avance enorme.

Yo quiero agradecerles a los miembros de la Justicia que nos acompañan hoy. Pido un aplauso también, porque se da una señal y un ejemplo importante de trabajo articulado, trabajo en conjunto, efectivo, real, cotidiano. No venimos hoy simplemente a hacer anuncios, sino a festejar lo que ya se está haciendo, cómo se está avanzando. Quiero dejar constancia también de lo complicado que nos resultaba en la etapa anterior trabajar en conjunto con el municipio en todos los planos, la verdad que era una enorme impotencia para nosotros, con un Gobierno provincial que plantea, básicamente, una inversión histórica en materia de seguridad, pero en segundo lugar un cambio profundo en la modalidad de trabajo. Un cambio profundo en la forma en la que los municipios y la Provincia se ponen de acuerdo, los poderes del Estado se ponen de acuerdo para dar una respuesta a un problema que siempre lo decimos, lo dice nuestro ministro, es multicausal, lo decía el ministro Berni también, es multicausal y por lo tanto necesita una respuesta, llamémosla, multiagencia, ¿no? De muchísimas, por no decir casi todos los aspectos de la política pública encaminados y dirigidos a dar respuestas y mejoras en materia de seguridad.

No es un tema la seguridad solamente policial, no es un tema solo del Ministerio de Seguridad, la cuestión de los menores no es solo una cuestión penal de establecer una edad determinada, sino que hay que tener políticas serias, concretas y que abarquen todos los aspectos vinculados con lo que lleva a un joven, a una joven a delinquir cuando debería estar en la escuela, cuando debería estar con su familia, cuando debería estar con sus amigos, cuando debería estar haciendo deporte, cuando debería estar dedicándose a, bueno, a cuestiones que tienen que ver con su edad y no esas situaciones extremas y tan tristes, pero que no tienen respuesta, como decía, solamente policial, ni en el aspecto policial de persecución de un delito consumado ni en el aspecto policial preventivo exclusivamente.

En este caso, lo que hay que evitar es que un pibe o una piba tenga la vocación, la voluntad, el contexto, el impulso para cometer un crimen, para realizar un delito. Y para eso, la verdad es que son tantas cosas las que debemos hacer que a mí me alegra muchísimo que empecemos a discutirlo cómo corresponde, no tirando un número de una edad, diciendo que esa es la solución mágica, porque es una reverenda estupidez. Sea mejor o peor esa solución y, además, no es materia ni siquiera provincial, pero tenemos muchísimo para hacer. Tenemos muchísimo para hacer, no es cuestión de pelearse con soluciones falsas, tan falsas como perturbadoras. Así que bueno, hoy venimos aquí a seguir adelante con nuestro plan de transformación en materia de seguridad.

Como decía recién, nos costaba muchísimo, por no decir, era prácticamente imposible trabajar en conjunto con el municipio de La Plata. Había no una diferencia política, que la había también, sino un manifiesto desinterés de las autoridades anteriores, Julio. Eh, no para coordinar, seguro también para coordinar, pero simplemente para darse un trabajo serio en un municipio que ha tenido un crecimiento tan grande, que tiene una importancia tan grande para nosotros y que tiene una heterogeneidad también porque el crecimiento de La Plata hacia los barrios, la diversidad de problemática, de cuestiones, requiere realmente una respuesta integral. 

Por eso, varias cosas. En materia de resultados quiero agradecerle a Julio, porque Julio está invirtiendo, está invirtiendo como no se había hecho antes en lo que refiere al equipamiento para la vigilancia, para el control. Hemos estado en lo que es el centro operativo. Bueno, que creo que ahí se está viendo algo de eso. La verdad que histórico, faltaban cámaras, además no había coordinación. Hemos logrado algo que es para nosotros muy importante, no voy a detenerme demasiado en esto porque mientras la derecha, la oposición, los diarios porteños dicen ‘el gobernador no habla de seguridad’, es como una muletilla que tienen, yo creo que en los últimos meses he dedicado tantas horas a hablar del tema de seguridad que ya llegué a la conclusión: lo que no quieren es escuchar lo que estamos diciendo porque les duele, les duele tener que comprender y tener que informar que en la provincia Buenos Aires reconocemos que hay problemas vinculados a la seguridad, pero en lugar de quedarnos de brazos cruzados o andar tirando fuegos artificiales por las redes sociales, hacemos un trabajo muy serio y una inversión muy grande. Inversión que se ha visto, por supuesto, perjudicada, fuertemente perjudicada por las políticas del Gobierno nacional. Unas políticas que para sintetizar, lo hizo muy bien el presidente de la Nación, ‘quiero fundir a las provincias’ dijo. ‘Quiero fundir a las provincias’. ¿Con qué objetivo? Era en el marco de un tratamiento de una ley. La entonces Ley Bases versión uno y dijo, ‘quiero fundir a las provincias, voy a fundir a las provincias’. Con un propósito que tiene que ver con su motosierra, su concepción general, pero que tenía que ver con un apriete a las provincias, ¿no? Con obtener de los gobernadores, de los legisladores, quiero decir, diputados y senadores nacionales de cada provincia, la satisfacción que necesitaba en materia de acompañamiento en cuestiones como fue luego el famoso entonces, felizmente olvidado hoy, Pacto de Mayo.

Un Pacto de Mayo que terminó no siendo ni pacto ni de Mayo, pero que en aquel momento se dedicaron a decir ‘el que no va y firma el Pacto de Mayo es…’, bueno, un montón de cosas que recibimos sobre nuestra persona. Pero lo que hizo en concreto, más allá de la parafernalia mediática, fue quitarles recursos a las provincias. Quitarle, yo digo, estoy adelante de representante del Poder Judicial, robarles recursos a las provincias. Y ese es el término adecuado porque se trata de recursos que estaban marcados por ley, o que estaban inscritos en los presupuestos y que el Gobierno nacional, por más ideología foránea, extraña, austríaca que tenga debe cumplir. Debe cumplir, no es una cuestión de la ideología del presidente, que nadie consigue entender, sino de cumplir las leyes y cumplir la Constitución Nacional. Eso es lo que estamos pidiendo, no que abandone esas ideas absurdas, que las siga teniendo, pero que mientras tanto cumpla con los compromisos, con las leyes y con el espíritu de la Constitución Nacional. Porque acá hay una cuestión más profunda que tiene que ver con el federalismo en la Argentina.

Hoy lo que tenemos es un Gobierno nacional que se pretende, yo decía, ni siquiera en las viejas antinomias de unitarios contra federales. Esto es de otra índole porque es un gobierno tremendamente centralista, pero que pretende que el Gobierno nacional, algo así como que no tenga ni territorio ni población. Todos los problemas temas reales, cotidianos, ciertos, concretos de la población de los argentinos que habitan dónde, en las provincias de Argentina y en la Capital Federal, le son absolutamente ajenos. Por eso digo, sin territorio y sin población. Es como llevar al extremo esta idea del centralismo, ¿no? Es como que se ocupa de una macroeconomía abstracta y lo hace viajando por el extranjero, recorriendo y hablando de temas que nadie comprende del todo y de ideologías que nosotros no tenemos. Nos critica por ser woke, que es algo que no creo que ningún argentino comprenda siquiera de qué se trata, pero está luchando contra eso. Lo digo con la seriedad que tiene porque mientras lleva adelante esas tareas, o lo que sea, priva a las provincias de sus recursos, de recursos que le corresponden.

En el caso de la provincia de Buenos Aires, pero esto abarca muchas provincias argentinas, le ha sacado los fondos para los jubilados, que es la compensación para las cajas previsionales que tienen las provincias, que no las transfirieron. O sea, le sacó plata del bolsillo a los jubilados, además de lo del PAMI, además de la baja de jubilación, la que le  corresponde al Estado Nacional por ley enviarles a las provincias, no se la envía para cubrir una parte de las jubilaciones, aquellos que no transferimos al PAMI nuestras cajas jubilatorias. Hizo lo propio con el Fondo de Incentivo Docente, que es plata que va al bolsillo de los maestros, las maestras. Luego hizo lo mismo también con fondos destinados al transporte, el Fondo Compensador del Transporte, que es el que hacía que el boleto de colectivo en todo el interior del país, incluida la provincia de Buenos Aires, así que dejo constancia de esto. La provincia Buenos Aires se considera parte del interior de la República Argentina. Somos una provincia más de la República Argentina.

Y en ese sentido, nos sacó el boleto de colectivo, nos sacó los fondos para los jubilados, nos sacó, y cuando uso ese plural es porque no es contra el gobernador. Él dijo, ‘voy a fundir a los gobernadores’, pero les saca la plata a los jubilados bonaerenses. ‘Voy a fundir a los gobernadores’, pero les saca la plata a los docentes bonaerenses, como de todo el país, porque esto es más general, mucho más general. 

Y sacó un fondo muy especial, muy particular, otro fondo más, pero voy a mencionar este, el fondo destinado a la seguridad. Había un fondo destinado a la seguridad, que era un fondo de compensación a la provincia de Buenos Aires reconociendo que la provincia de Buenos Aires ha tenido un crecimiento, bueno, enorme. Ustedes consideren que, por ejemplo, el conurbano bonaerense en el año ‘47, creo que fue el censo, tenía 3 millones de habitantes y la Ciudad de Buenos Aires tenía 3 millones de habitantes. Año ‘47, no 1810, año ‘47. Y hoy el conurbano bonaerense tiene 13 millones de habitantes y la Ciudad de Buenos Aires sigue con los mismos 3 millones de habitantes. Y ese crecimiento poblacional no es por una cuestión biológica, es porque ha habido migración interna en la Argentina que ha ido a radicarse al conurbano bonaerense, a buena parte de la provincia Buenos Aires, también al municipio de La Plata. Nosotros lo hemos siempre dicho, bienvenidos con los brazos abiertos todo aquel que quiera radicarse en el suelo bonaerense, parece el preámbulo de la Constitución. Pero bienvenido todo aquel que quiera radicarse, pero evidentemente hace falta infraestructura, hace falta educación, hace falta salud, hacen falta caminos y hace falta seguridad también. 

Entonces, comprendiendo esa particularidad de la provincia de Buenos Aires, particularmente del conurbano bonaerense, hubo recursos que se destinaron desde el Gobierno nacional, específicamente a sufragar gastos e inversiones vinculadas a la seguridad en la provincia de Buenos Aires. Gastos de los que había que rendir peso por peso, que no eran de libre disponibilidad, sino de aplicación específica. Y así lo hicimos todo el tiempo hasta que llegó Milei.

Y les privó, no al gobernador que quiere fundir, sino al pueblo de la provincia de Buenos Aires de los recursos necesarios para seguir en una inversión histórica que venimos haciendo en materia de seguridad, también en materia penal, perdón, de servicio penitenciario, también en materia de infraestructura judicial. Estuvimos el otro día en Lomas, pero estuvimos acá inaugurando edificios que se esperaban hace un montón y sometidos también a investigaciones por corrupción en el gobierno que nos precedió. Así que, todo eso requiere recursos. Hay palabras, hay políticas, pero para que funcionen tiene que haber presupuestos y recursos.

Así que, privarnos de 750.000 millones de pesos destinados a inversiones en seguridad, la verdad es que es algo que el pueblo de la provincia Buenos Aires le reclama al gobierno de Milei, porque ¿en qué la usa? En sostener el tipo de cambio, por ejemplo. Porque la usa en sostener la bicicleta financiera, no es que no haya plata. Miren, en economía los recursos no desaparecen. Si salen de un lugar, van a otro. 

Así que esto no es una historia de ajuste, es una historia de reubicación y de redistribución de los recursos del Estado desde necesidades de las mayorías a negocios. Eso es lo que está pasando hoy en la Argentina para simplificar. Y bueno, nos privaron de estos recursos.

Yo quiero decir que en la provincia de Buenos Aires tenemos una política de seguridad igual, por eso, habiendo perdido los recursos que nos tenía que dar y que estamos reclamando ante la Corte Suprema de Justicia, así que uno lee todos los días la Corte, lo que ocurre, lo que no ocurre, yo tengo un comentario con la Corte: que trabaje, que dé respuesta para que le devuelvan a la provincia de Buenos Aires lo que le corresponde.

Siete denuncias, siete veces hemos recurrido a la Corte y duerme el sueño de los justos o más bien de los injustos, porque la verdad que no estamos recibiendo recursos que necesitamos todos los días. ¿Qué hemos hecho? Bueno, como hacemos cada vez que Milei nos saca algo, le saca algo al pueblo de la Provincia, hacer el esfuerzo más grande que podemos para sostener, a veces para compensar, a veces para sustituir aquello de lo que nos priva el Gobierno nacional. 

Hacíamos, hace unos días, un anuncio con respecto a medicamentos bonaerense porque el Gobierno nacional cortó los medicamentos, cortó los oncológicos, en materia de educación lo mismo, bueno, en todas las áreas. Hacer un esfuerzo, nosotros decimos ‘escudo y red’ ante las políticas nacionales. 

En el caso de la provincia de Buenos Aires, hemos resuelto distribuir un fondo de 170.000 millones de pesos que no compensa, obviamente, sumas que superan los presupuestos provinciales, pero para acompañar a la seguridad y particularmente a los municipios. Así que hoy, ya para ir concluyendo, estamos comentando los 3.500 millones de pesos que le corresponden al municipio de La Plata para inversiones específicas en seguridad. Están en buenas manos, Julio, así que muchísimas gracias a todos ustedes. 

Luego, 40 motos, hemos comprado 750 motos para abastecer a los diferentes municipios, 750 patrulleros también. Así que hoy vamos a estar recorriendo un poco alguno de estos, esperábamos hacerlo, no lo pudimos, no sé si lo vamos a poder hacer por la lluvia, creo que nos vamos a mojar y recorrer también lo que hicimos, así que, por supuesto.

Y quiero decir algo en punto a algunas campañas electorales ya directamente. Porque  empezó el año electoral y ustedes vieron que la cuestión de la seguridad de la provincia de Buenos Aires empezó a convocar más la atención de los medios porteños.

Nosotros venimos gobernando hace 5 años, llevando adelante, más de 5 años, las mismas políticas, coordinación con los municipios, reorganización de la Policía, reequipamiento de nuestra policía, coordinación entre los diferentes ministerios, coordinación, por eso también quiero agradecer y celebrar las mesas que se hacen en conjunto con el Poder Judicial. Tanto la penal, que tiene que ver con los adultos como con los jóvenes, importantísimo para nosotros estar en la misma página, para que después no empiece entre la Provincia, el Municipio y acaso la Nación o entre el Poder Judicial, el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo, cuando hay un problema, a tirarse el fardo de unos a otros. Me parece que lo más sano pero además lo más eficaz, es trabajar en conjunto todo el año, todo el tiempo, dar la cara todos juntos, marcar lo que hacemos bien, lo que hacemos mal, lo que falta y no andar tirando las responsabilidades porque este es un gobierno que no esconde nada abajo de la alfombra y que siempre da la cara.

Quiero decir, en ese sentido y en el marco de la campaña de marketing político, que bueno, estábamos acostumbrados a campañas sucias en los políticos, pero han pasado de pantalla, han subido de nivel. Han subido de nivel. Ahora son absolutamente cloacales, roñosas y espantosas, ¿no? Son capaces de decir cualquier cosa por redes sociales, incluso retuiteado por el propio Presidente de la Nación, cualquier cosa, así que nosotros seguimos trabajando con muchísimo esfuerzo y con mucha seriedad.

No queremos entrar en provocaciones, por eso también hablamos a través de los datos. Han dicho cualquier cosa, pero digo, en el medio de eso, que es un baño de sangre la provincia de Buenos Aires. Que es un baño de sangre la provincia de Buenos Aires. Hay delitos, sí, hay homicidios, sí, por supuesto. Lo marcamos claramente desde que estamos, desde que asumimos, y en la serie de homicidios para hablar del tema sangre, directamente vinculado a homicidios, a muerte. En la provincia de Buenos Aires, desde que llegamos, lo que logramos, real, efectiva y concretamente es tener los dos mejores años en materia de homicidios de la historia de toda la serie, de toda la serie de homicidios. 

Lo cual, habla, por supuesto, al ser multicausal, uno no puede decir, ‘eso es simplemente resultado de determinada acción’, sino que es algo para, no para celebrar y festejar, sino simplemente para ver que se están logrando avances y seguir trabajando en una dirección que da determinados resultados.

En ese sentido, ustedes saben que la campaña más intensa, porque empezó este año electoral, tuvo un pico en enero y otro pico en algún momento de febrero del tema de homicidios en la Provincia. Yo lo que quiero decir, simplemente, para recibir críticas, recibir también algún acompañamiento, recibir lo que sea, pero para hablar con la realidad, lo que quiero decir es que tenemos ya los datos de homicidios del primer trimestre de este año, del año 2025 y lo que marca es que fueron no tomando solamente los homicidios vinculados a homicidio en ocasión de crimen. O sea, esto tiene homicidios también intrafamiliares, en riña, todo tipo de homicidios que no tienen necesariamente que ver con hechos de inseguridad, son todos los homicidios. En el año 2024, que fue un año también históricamente bajo, hubo en los primeros meses 270 homicidios. Este año 2025, 234 homicidios, son 36 homicidios menos, un 13% de caída en la cantidad. En el índice, cada 100.000, como hay un crecimiento poblacional, seguramente la comparación da mejor.

Pero bueno, de nuevo, ninguno de los datos en materia de seguridad, que a veces se compara, la comparación, ustedes lo conocen bien, quiénes son expertos en la materia, la comparación en materia de seguridad, yo creo que la única a nivel internacional que se hace es la de homicidios cada 100.000 habitantes. ¿Por qué esto?

Porque denuncias, otros delitos, bueno, siempre son materia de polémica, discusión en la registración, en la registración a veces, en si se denuncia o no se denuncia determinado delito. Así que, todo eso es opinable y discutible. La única estadística que no se puede fraguar, que no se puede cambiar, que no se puede modificar y por eso se usa a escala internacional es la de homicidios, ¿por qué? Porque un homicidio queda registrado en diferentes dependencias, no solo del gobierno, sino de diferente, del Ejecutivo, sino de otros poderes, con lo cual, es algo donde los números son bastante fidedignos.

Siempre se habla y se compara, qué se yo, yo el otro día veía porque estaba viendo las noticias de Estados Unidos y de Trump. Estaba viendo que el índice de homicidios cada 100.000 habitantes en la capital de los Estados Unidos, en Washington, es de 40 aproximadamente, 40.

Nosotros, en la provincia Buenos Aires, tuvimos creo que el año pasado 4,4 cada 100.000 habitantes, que es como se miden los homicidios. Porque yo puedo decir 240, pero si son 100 millones habitantes, 200 millones de habitantes, 500 millones de habitantes o 5.000 habitantes, bueno, es distinto el índice, ese es el término comparativo, el relativo, el proporcional a la cantidad de habitantes.

Entonces, en la provincia Buenos Aires cuando uno mira, por ejemplo, la provincia Buenos Aires 4,4, observa Uruguay que está asociado, sin hacer ninguna apreciación de ningún tipo, pero está asociado a veces a determinadas características, si no me equivoco, fue casi 12. Casi 12, la tasa de homicidios cada 100.000 habitantes.

Y puedo seguir así. Muchas ciudades de Estados Unidos, ciudades de la región. Bueno, y quiero decir esto porque hablar de estadísticas siempre ante un caso particular no es que sea mala idea en comunicación, es inadecuado, porque cada caso duele infinito. Entonces, la verdad que hablar de subieron o bajaron las estadísticas es algo improcedente, algo que no corresponde. Pero cuando hay que evaluar las políticas hay que hacerlo con los indicadores objetivos y consagrados para hacerlo.

Entonces, en este sentido, yo quería decir que cuando uno mira la tasa de homicidios de Argentina y yo la escuchaba a la ministra Bullrich, que de alguna manera nos habilitó a dar este tipo, por lo menos de consideraciones, Bullrich y el Presidente de la Nación en su discurso de apertura de sesión del corriente año, felicitó a la ministra Bullrich porque la tasa de homicidios de la Argentina estaba, no sé si en el nivel más bajo, o en los niveles más bajos de la historia.

O sea, dijo, como suele decir, la mejor ministra de la historia porque la tasa, había pasado un año de gobierno y uno sabe que en un año de gobierno… Pero bueno, no quiero ponerme a matizar esta cuestión ni a comentarla, ni analizarla. Lo único que digo es que había un imposible, porque mientras decían que Bullrich era la mejor ministra de la historia de seguridad, y al mismo tiempo diciendo que la seguridad es un problema de las provincias, ¿no?, por esto de no hacerse cargo de muchísimas cosas. Entonces, decían ‘es la mejor ministra porque la estadística nacional está en el nivel más bajo’, decían ‘la provincia Buenos Aires es un baño de sangre, hay mucho homicidio’. Lo cual es una contradicción en los términos, imposible directamente, que en la Argentina tengamos la menor tasa de homicidio, mientras en la Provincia hay un crecimiento exponencial de los homicidios, básicamente por un tema estadístico, somos el 40% de la Argentina. Entonces es imposible, contradictorio o básicamente es una mentira tonta, estúpida que se pisa la cola, decir, ‘no, la provincia de Buenos Aires es un desastre en homicidios, pero la Nación en conjunto le va muy bien’. 

Independientemente de cualquier otra consideración, por eso yo lo que tengo para decir es que si vamos a medir por tasa de homicidio, nosotros estamos en los niveles más bajos. Pero en lugar de decir, ‘es lo mejor, somos los mejores, qué genios que somos’, decimos lo siguiente: vamos a seguir trabajando para seguir reduciendo los hechos criminales en la provincia de Buenos Aires, en todos sus formatos y lo vamos a hacer seriamente con inversión, con trabajo entre los diferentes organismos del estado provincial, con los diferentes poderes del Estado, con los municipios y la Provincia y con el pueblo de la provincia de Buenos Aires, porque la seguridad es algo que hay que abordar desde todos los güines, desde todos los ángulos y dar una respuesta contundente.

Aquel que cometa un delito, tiene que pagar por eso, pero tenemos que evitar que lo cometa. Tenemos que evitar que le cometa. Así que ese es el trabajo en el que estamos abocados. Muchísimas gracias, Julio. Gracias, Javier. Enorme trabajo de los dos. Felicito a todos los presentes porque es un tema que nos preocupa cotidianamente y estamos tratando de mejorar nuestra respuesta. Muchas gracias.