Entrega de viviendas en Tapalqué
Buenos días a todos y a todas. Primero, agradecerle al intendente de Tapalqué, un inmenso intendente, Gustavo, gracias por recibirnos de nuevo. Porque uno recorre los distritos de la provincia de Buenos Aires y la verdad que hay una batería de políticas que llevamos adelante, que tienen que ver con salud, con educación, con seguridad, con vivienda, pero siempre que venimos a Tapalqué hay un adicional, un plus que se debe a la creatividad, a la inventiva y al enorme trabajo del intendente Gustavo Cocconi.
Así que, Gustavo, siempre nos llevamos novedades de Tapalqué. Muchas visitas hemos hecho, emprendimientos que tienen que ver con el turismo, con la producción, que tienen que ver con la infraestructura, con los adultos mayores.
Pero hoy, 3 cuestiones centrales para la vida de Tapalqué, que tienen que ver con políticas públicas. Empiezo por la primera, porque no la hicimos aquí, sino en el Centro de Entrenamiento de los Bomberos Voluntarios. La provincia de Buenos Aires tiene, en cada localidad, en cada municipio, un cuerpo de bomberos voluntarios, que está compuesto por vecinos y vecinas que le ponen muchísima dedicación, pero sobre todo mucha solidaridad. Y que le faltaba algo a los bomberos voluntarios de la Provincia, que tiene su federación, que era poder avanzar en la jerarquización y en la profesionalización de la formación que hacen. Esto permite, como dijo nuestro ministro, Javier Alonso, darle orden, darle mayores capacidades, generar más integración con los cuerpos de bomberos también de nuestra policía, con la Defensa Civil.
Pero vine en el año ‘21 a inaugurar acá en Tapalqué el primer Centro de Formación para Bomberos que tiene diferentes equipamientos, entre ellos, lo veíamos hoy, simulación de situaciones que atraviesan los bomberos. Fíjense que si no, de otra manera, la única forma de aprender es que te lo cuenten o experimentando en el momento crítico. Así que importantísimo para casos de derrumbe, para casos de encierro, para incendios que tienen que ver con complejidad de explosiones, en el interior del domicilio.
Hoy me contaban la tecnología que se le ha puesto. Es un verdadero orgullo, es el único de Argentina, el único de Latinoamérica, es bonaerense y está en Tapalqué.
Hoy lo que hemos hecho es darle, a través del Ministerio de Educación, acá está nuestro ministro Alberto Sileoni, darle a la formación de los bomberos, darle un carácter institucional a través del Ministerio, que nos permite que esa formación tenga mayor reconocimiento y que, avanzando paulatinamente de este nivel 1 que hoy se ha aprobado, se pueda pasar a un nivel 2, y después, como pretenden los bomberos voluntarios de toda la Argentina pero lo estamos haciendo en la provincia de Buenos Aires, un bombero pueda tener, también, formación universitaria.
Nosotros creemos que los que te salvan la vida, los que ponen el pecho, el cuerpo cuando hay un incendio tienen que tener el reconocimiento que corresponde. Y eso ocurrió hace un ratito, donde les entregábamos la documentación, las actas que certifican que esto es así, y vamos a seguir trabajando.
Pero recién, una recorrida por acá a unas cuadras, ¿no? al Mercado Bonaerense que tiene a partir de ahora Tapalqué. Mercado bonaerense fijo, ya nuestro ministro Javier Rodríguez acaba de comentar cuál es esta política y el alcance que tiene.
Son esas políticas silenciosas pero permanentes, persistentes, acumulativas, que lleva adelante nuestro gobierno, a veces sin bombos ni platillos, ¿no? Y por supuesto, sin esperar ni pretender cobertura mediática de los medios nacionales, de los llamados medios nacionales, ¿no?
Cuando uno prende los medios nacionales se va dando cuenta con el tiempo de que muy nacionales no son, son porteños. Son porteños. Informan desde una mirada, desde una perspectiva, que en la provincia de Buenos Aires, muchas veces lo decimos, andan patrullando como si fuera una cuestión de orgullo propio, ¿no? para mostrar que la Provincia tiene dificultades, tiene problemas, que no lo puedo negar, por supuesto que la tiene, es prácticamente medio país.
Somos la Provincia más poblada, somos la Provincia más extensa, en términos continentales, somos la Provincia más diversa, 135 municipios, cada uno con sus características, pero a mí me gustaría que alguna vez se dignen a informar estos avances, estas decisiones, este esfuerzo que hace la provincia de Buenos Aires cotidiano y diario, en cada uno de sus puntos y en cada uno de sus rincones, que se hacen en las escuelas de la provincia de Buenos Aires.
Yo me acuerdo cuando llegué al gobierno, al primer gobierno, nos encontramos que el estado de los edificios escolares era realmente ruinoso, calamitoso. Ustedes recordarán que en Moreno tuvimos que sufrir la explosión de una escuela. Por supuesto que lo menciono así al pasar porque a uno ni le gusta recordarlo. No queremos hacer, de ninguna manera, política con esto, discusión, pero sí quiero decir que las escuelas se caían a pedazos y que tenían riesgo de vida para quienes asistían a las escuelas.
No es que no te pueda pasar algo de gravedad, por supuesto, ¿no? Aún teniendo todo puede pasar, pero si no tenes nada, es más frecuente que ocurra. Así que lanzamos inicialmente un programa que se llamó Escuelas a la Obra. Que tenía como objetivo, primero, arreglar los problemas de gas, de electricidad, de los techos, de las paredes, de la mampostería, de los baños de las escuelas que estaban muy destruidos. Y que, como digo, riesgo para quienes trabajan y riesgo para quienes estudian. Así lanzamos ese programa Escuelas a la Obra que ya tiene, aproximadamente, 7.500 obras terminadas en las escuelas de la provincia de Buenos Aires. No le mostraron una en la tele porteña, una obra. A veces empieza el invierno, no hay calefacción en una escuela, cuando llegamos no había prácticamente en ningún lado. Así que la verdad es que venimos avanzando y el pueblo de la provincia de Buenos Aires es un pueblo que comprende estas cosas, que sabe de sus dificultades, que sabe sus deudas y que las asume con responsabilidad y con sacrificio. Por eso, en el día de ayer en Moreno, inaugurábamos un edificio escolar. La gestión pasada, otra gestión de esas del ajuste, del ‘no hay plata’, en cuatro años, endeudando a la Provincia, también el lunes pagamos un vencimiento de la deuda que tomó Vidal en dólares, récord de endeudamiento, como siempre, récord de demasiado endeudamiento y poca obra. Y ahora ya directamente que no hay obra pública, que no va a haber nunca más, que no hay plata.
Voy a hacer algún comentario sobre eso ya al final, pero quiero decir que en esos cuatro años, endeudando a la Provincia para siempre prácticamente, y endeudándola como nunca antes, construyó 65 escuelas en cuatro años, o eso dicen. Nosotros ayer, con dos años de pandemia que nos impidió prácticamente trabajar, porque no se podía desarrollar obra, con todas las dificultades que hay y con las que agregó ahora Milei, pero ayer estábamos inaugurando la escuela número 230 en la provincia de Buenos Aires. Más de tres veces más.
Y uno lo tiene que decir porque es una diferencia enorme tener escuela o no tener escuela. Enorme, de vida. Como lo es tener computadora y no tener computadora. Y hoy tenemos un Gobierno nacional que tiene una ideología muy fuerte, digo una ideología porque dicen ‘teoría económica’, bueno, pero la teoría tiene que tener algún vínculo con la verdad, con la realidad, con la experiencia. El resto o es ideología o es verso y mentira.
Y lo que estamos viviendo es una época de mentiras y verso, donde dicen que todo lo soluciona el mercado. Gustavo, acá en Tapalqué la salud, la salud no tiene, a mí me gusta decir, no tiene ninguna prohibición el sector privado para venir a poner una clínica, un gran hospital, no hay prohibiciones, eh. O sea que el mercado tiene toda la libertad de hacerlo, y ejerce la libertad de una manera muy particular, no lo hace. Así como puede hacerlo, puede no hacerlo tampoco.
Pero, ¿cuál es el problema que hay? ¿Por qué no lo hace? ¿Por qué el mercado no es la salvación universal para todos y en todas las circunstancias? Y porque cuando no hay rentabilidad, cuando no hay ganancia el privado no avanza. Y no es un reproche, no lo digo con enojo, con resentimiento ni señalando a nadie. Es lógico, piénsenlo ustedes si tuvieran un capital, un dinero y tienen que decidir dónde invertirlo, una inversión requiere después poder recuperar en un plazo eso que se puso más una ganancia. ¿No es así? Entonces, probablemente hagan las cuentas y se den cuenta que poner una Clínica de los Arcos, una Suizo Argentina acá en Tapalqué no es viable desde el punto de vista privado.
Muchos pueblos, 85 de nuestros distritos, no tienen ningún prestador privado de la salud, no tienen clínica privada, no tienen hospital privado, no tienen, no hay. No es porque se lo prohibieron o porque no hay libertad. Si no, precisamente, porque sí hay libertad y buscan el negocio, y si no hay negocio, no lo hacen. ¿Y por qué no es negocio? O porque no hay suficiente cantidad de demanda, no hay volumen, no hay escala o porque la demanda que hay no tiene el poder adquisitivo que permite pagar las cuotas de las prepagas. O como algunas clínicas u hospitales que tienen sus propios asociados, afiliados y pagan una cuota.
¿Saben de cuánto es una cuota de una prepaga? 300.000, 400.000, 500.000, 600.000, 700.000 pesos por mes por cada afiliado. Ahí tienen porque no funciona el sistema privado en algunos lugares, porque no está el que pueda pagar 700 lucas. Y los que hay, si hubiera, son muy poquitos como para hacer el negocio. Entonces basta de verso, basta de mentira, que la persona que hoy gobierna la Argentina largue la motosierra y se ponga los botines y empiece a caminar lo que pasa en la Argentina, las situaciones que genera, los problemas que produce y las necesidades que no cubre.
¿Qué hay donde no hay clínica privada? Hay hospital municipal u hospital provincial, hay Estado.Y si no hubiera Estado, no es que se corre el Estado y viene el privado, no queda nada. Donde no hay Estado, en esas circunstancias, no queda nada, hay desamparo, hay abandono. Por eso creo que muchos habrán escuchado estas ideas de Milei y dicho ‘bueno, mirá si el problema es que hay Estado, dejemos que haga todo el privado’.
Y bueno acá tenemos, toda la provincia de Buenos Aires, salud, educación, seguridad, también hay privado. Y nadie impide que cada uno le pague a la seguridad privada. Pero imaginemos, la cuota del colegio privado, más la cuota de la prepaga, más la cuota de la seguridad privada, más lo que dijo el otro día ‘si quieren una obra pública, hagan una vaquita’. Que los vecinos hagan una vaquita, pasen la gorra, y se hagan un puente, una autopista, un puerto.
Por eso digo que les están tomando el pelo, eh, nos están tomando el pelo. Porque la realidad es otra, es muy distinta y ahora vemos los efectos de esta política. Se borra y desaparece el Estado nacional, no está, no cumple con sus obligaciones, con sus responsabilidades, y los problemas no desaparecen porque no esté el Estado nacional. Es más, crecen, crecen y crecen. ¿Y sobre quién recae esas dificultades? ¿Qué ha pasado con la salud pública? Más gente que necesita ir al hospital público, no menos con Milei. Porque no se puede pagar el remedio, porque no puede pagarse un tratamiento que tal vez antes afrontaba con el bolsillo propio. Así estamos.
Lo mismo con las computadoras. Lo de las computadoras también lo resuelve el mercado a su manera, que es que el que puede comprarse una computadora ningún problema, va a un negocio de informática, se compra la computadora. Pero la realidad es que los pibes en la provincia de Buenos Aires necesitan, desean, quieren y no tienen porque en su familia no la pueden pagar.
Entonces, ¿qué es lo que termina pasando cuando se deja todo librado al mercado? Que los que pueden tienen, y los que no pueden se quedan sin nada. Y ambos necesitan igual. La necesidad tiende a ser parecida o la misma. Qué pibe no va a querer, qué piba no va a querer una computadora, una computadora para explorar, para ver, para jugar, para divertirse, para estudiar, para trabajar, como decía Carli, ¿quién no va a querer? Todos quieren, pero muy poquitos pueden. Esa es la realidad que tenemos. Y uno dirá, ‘ah, por la Argentina, por lo que pasó’. No, no, no. Creanme que es toda Latinoamérica para empezar, si agregamos otros continentes como África. Pero sigamos, Europa, también, Estados Unidos, también.
Yo lo digo y no porque me resulte algo ni atractivo, ni divertido, simplemente para contar cuál es la realidad. En la campaña presidencial, ahora, Estados Unidos que se vota tirando a fin de año, están proponiendo un programa de salud que permita que millones de norteamericanos que no pueden pagarse la salud por privado, accedan a la salud básica.
Porque si no se mueren en la calle. Lo vimos en pandemia, que no tienen un sistema y estaban apiladas las ambulancias porque no tienen un sistema de cobertura universal. No quiero decir que somos mejores o somos peores, es destino pero, ¿se dan cuenta? Tienen un programa de vivienda, 3 millones de viviendas dice una de las candidatas a presidenta, que según dicen está peleando y podría ganar, 3 millones de viviendas le ofrece a los norteamericanos.
¿Qué pasa? ¿Qué pasa con el mercado de Milei? Lo que pasa en todos lados del mundo, el que tiene la capacidad adquisitiva y con tanta desigualdad, son poquitos, accede, y el que no se queda afuera. Sin vivienda, sin salud, sin educación, y así sucesivamente, y sin obra pública y a veces sin alimento.
Por eso estas computadoras que son del ‘Conectar Igualdad bonaerense’ las veníamos distribuyendo en todas las escuelas, a todos los pibes, están cortando los recursos, no quisimos descontinuar el programa por eso seguimos distribuyendo computadoras, en escuelas rurales, en escuelas de Delta, en escuelas especiales de la provincia de Buenos Aires, para que cada pibe y piba, sobre todo los que están más lejos de los centros urbanos o con más dificultades de acceso, puedan tenerla.
El mercado bonaerense, decía Javier, 121 municipios, 123 municipios de los 135 donde hay mercados, donde hay ferias, que acercan al productor y al consumidor. ¿Esto qué permite? Abaratar los productos del lado del consumidor, son más baratos cuando los comprás, 20%. Pero paradójicamente el que produce cobra más. Parece magia, parece un misterio, paga menos y cobra más. Paga menos el que consume, recibe más el que produce. ¿Cuál es el gran misterio? Y, la cadena de comercialización, la cadena de logística, los intermediarios. Los intermediarios. Cada intermediario, por eso tampoco es una crítica, es alguien que hace una tarea, que tiene los galpones, que tiene las camionetas, que distribuye o que compra al por mayor. Esa cadena de intermediación tiene un sentido y tiene una lógica, ahora el resultado es este: los dos eslabones más débiles son los de las puntas, y en el medio cada uno va haciendo su ganancia que le llega finalmente al que compra y le reduce al que vende.
Entonces, esta política tiene que ver con acercar productor con consumidor, con achicar la cadena de intermediación. Y esto que se hace en buena parte de los municipios de la Provincia, que se hace a través de ferias, de diferentes instrumentos transitorios, que aparecen los fines de semana, aparecen determinados días, bueno, tienen un grado más elevado, que es el de los mercados bonaerenses fijos. Los mercados fijos, ¿qué les voy a contar si lo tenemos ahí atrás? Son estos edificios hermosos donde tienen puestos, stands para diferentes rubros que tienen que ver con la canasta de consumo, ha caído mucho el consumo desde que llegó Milei. Estamos en niveles de caída de la producción y del consumo sólo comparable con las peores crisis argentinas, con la pandemia, con situaciones internacionales graves, con las crisis mundiales, sólo ahí se vió este desastre. Solo ahí.
Entonces, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires no hace, no genera y no produce la política económica. Pero sí, ante una situación como la que hay, de desamparo, de abandono, de crueldad y de efectos económicos que perjudican a las mayorías y benefician a un puñado de empresas, de especuladores, ante eso, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires viene a funcionar como escudo y como red para cuidar a su pueblo.
Este mercado es eso, abaratar los alimentos, y al mismo tiempo, los productores también están complicados, darles, me comentaban recién los emprendedores que están acá produciendo verdura, diferentes productos alimenticios en Tapalqué, también una política pública que se hizo junto al Intendente, tiene un puesto acá de la UTT para vender más barato. Primer puesto que les permite llegar directamente al consumidor, les venden más barato y ganan más. O sea, que es un negocio redondo para el que produce y para el que consume. En ese sentido, este es el octavo mercado bonaerense fijo. Cuando empezamos con esta política, nos propusimos llegar a 10. Ya estamos en 8, ahora me decía Javier que vamos a llegar a 12 mercados. Así que seguimos expandiendo en el resto de la Provincia. Se corre el arco, Javo, se corre el arco porque es más necesario todavía en una situación como esta.
Y con esto termino con las viviendas. Ni hablar de la tontería, la estupidez cuando se aplica la cuestión de la vivienda, de esto que te dice que el mercado, las empresas privadas solucionan todo. Y de nuevo es cierto, el que puede pagarse una vivienda, se puede comprar una casita, un terreno o construirse, o hasta una mansión, hay eso, pero es muy poco. La provincia de Buenos Aires representa muy poquito del total de la población. Tenemos muchísima gente que con su sueldo, muchísimos laburantes, pero también comerciantes, empresarios que con sus ingresos no pueden llegar a construirse una casa.
Por eso, es muy importante ahí también el papel del Estado. Estas son 24 viviendas que estamos entregando hoy, que además fueron hechas, y pido un aplauso, tan preciosas, fueron hechas por una cooperativa.
Así que, también el mercado fue construido por una cooperativa. Así que esto también da trabajo, fíjense, vivienda para unos, trabajo para otros. Hay que ser mezquinos, ¿no? para suspender… Han dejado 16.000 viviendas paradas desde el Gobierno nacional, 1.000 obras, 80 escuelas, todo esto paró Milei.
Uno, con esto quería terminar para dejarlo en claro, esto de ‘no hay plata’. Dos cosas. Lo primero es que, a mí que tengo una responsabilidad, al intendente de Azul, al intendente de Tapalqué, saben qué fácil sería para nosotros que cada vez que alguien nos toca la puerta, decir ‘no hay plata’. Pero también es de una pereza, es de una pereza, de una falta de compromiso, de una falta de comprensión, pero también de imaginación, de una falta de interés. Ya no sé qué nombre ponerle.
Porque nosotros lo vivimos hace no tanto en Bahía Blanca. Vino el Presidente de la Nación porque había habido un evento climático, tornado le decimos nosotros, que volteó 5.000 árboles, se llevó no sé cuántos techos, hubo víctimas fatales también. Y vinieron, yo fui bien temprano, estuvimos trabajando, vinieron los bomberos voluntarios de toda la Provincia de los lugares cercanos. Llevamos desde los depósitos que tenemos en toda la Provincia, chapas para contribuir. Llevamos máquinas. Estábamos juntando todos los esfuerzos solidarios de Bahía Blanca, y pasó en muchos lugares de la Provincia.
Estábamos trabajando y teníamos un mapa ahí con el intendente de Bahía Blanca, veíamos dónde faltaba, qué hacía falta. Estaba con el Ministro de Seguridad, estábamos trabajando ahí, cae el Presidente con dos ministros, ya era raro, ¿no? Ya algo era raro porque llegó vestido de militar, es como que yo venga a inaugurar estas casas y venga vestido de plomero, a ver si parece que tengo… Yo no le veo el chiste a esto de vestirse de algo que uno no es.
Digo esto porque lo escuchaba ayer al Presidente de la Nación decir que los científicos, por tener un título, se creían no sé qué, como mandando a laburar a los científicos de la Argentina. Yo digo, los científicos argentinos, nuestros premio Nobel, nuestra universidad pública, los centros del programa Puentes, todo lo que hacemos para formar universitariamente a nuestra población, a nuestro pueblo bonaerense, a nosotros nos llena de orgullo, los científicos bonaerenses y argentinos son un orgullo para nosotros. Así que ya, ya le le digo al Presidente de la Nación que se haga un buche y se lave la boca antes de hablar mal de los científicos de la Argentina, sobre todo un hombre que viene mintiendo que es doctor como si tuviera un título que no tiene hace años. Así que si no le importan los títulos, que se saque el mentiroso que se pone cuando asumía, todo el tiempo, en los libros, afuera, que estudió donde no estudió. Así que yo creo que es envidia. Yo creo que es envidia. Además de ignorancia, envidia.
Pero decía recién, decía recién. Nosotros entendemos que esto de que no hay plata por un lado es un subterfugio, un método para no hacerse cargo de nada. Vino a Bahía Blanca y dijo ‘haga lo que puedan, no cuenten con nosotros’, y se fueron, eso es lo que pasó.
Y bueno, la provincia de Buenos Aires utilizó sus recursos, hizo esfuerzos, trabajó para darle respuesta a cada uno de los pueblos que había sufrido la calamidad climática de ese momento, esa catástrofe que tuvimos. O sea que si nos tenemos que arreglar solos, nos podemos arreglar solos. Pero quiero decir también, que quien se presenta a elecciones para ser presidente de la Nación tiene también obligaciones y no las está cumpliendo.
Y cuando nosotros juramos en la provincia de Buenos Aires, los ministros también, yo mismo, cuando juramos, juramos encima de una Constitución y dijimos que la teníamos que cumplir, juramos cumplirla. Pero juramos también hacerla cumplir. Te dicen ‘¿vas a cumplir y hacer cumplir la Constitución Nacional?’. Y nosotros prometimos eso. Así que yo digo, Presidente, no se va a poder escapar de sus responsabilidades tan fácilmente.
La educación, la salud, la seguridad, la infraestructura, la obra pública, la universidad, la ciencia, son responsabilidades, las están evadiendo, las están eludiendo, y acá estamos inaugurando viviendas. Aún con los recortes que nos ha puesto, inaugurando un mercado, inaugurando viviendas, anunciando cloacas, anunciando nuevas obras, es un esfuerzo enorme, así que digo que en la provincia de Buenos Aires, al revés de lo que pasa a nivel nacional, pueden contar con este gobierno y con este gobernador. Muchísimas gracias.